El cruceiro de la plaza de San Antonio, entre los más singulares de Galicia

Francisco Albo
francisco albo MONFORTE / LA VOZ

PANTÓN

El cruceiro es uno de los pocos vestigios materiales del convento franciscano que existió en la plaza de San Antonio, construido en 1506 y demolido en el siglo XIX
El cruceiro es uno de los pocos vestigios materiales del convento franciscano que existió en la plaza de San Antonio, construido en 1506 y demolido en el siglo XIX ROI FERNANDEZ

Un experto en este tipo de monumentos resalta el especial valor de una pieza cuya importancia pasa desapercibida

28 nov 2019 . Actualizado a las 16:05 h.

Aunque no suele ser mencionado entre los principales elementos del patrimonio histórico de Monforte, el antiguo cruceiro de la plaza de San Antonio reúne una serie de características que lo sitúan entre los más singulares de Galicia. Tal es el parecer del investigador lucense Fernando Arribas, responsable de la primera catalogación exhaustiva de los cruceiros y petos de ánimas de la Ribeira Sacra. Con motivo del Día Internacional del Patrimonio Mundial, Arriba dio ayer en el museo del pazo de Tor una charla sobre los cruceiros monfortinos, con especial énfasis en el del barrio de San Antonio.

Según apunta el investigador, las singularidades de esta obra empiezan ya por el material del que está hecha, ya que -al contrario de lo que sucede en la gran mayoría de los cruceiros gallegos-, las figuras que la coronan no están talladas en granito. «En realidade non se sabe con certeza que tipo de pedra é», señala. «Un experto que coñezo cre que é algún tipo de gneis, quizá da variedade coñecida como ollo de sapo, que está presente de forma natural en varios lugares da Ribeira Sacra e outras partes da provincia». Un geólogo portugués que vio la escultura en una fotografía que le mostró Arribas opinó que podría tratarse de basalto. «Para sabelo con certeza tería que examinala de perto e con coidado algún especialista, pero en todo caso é un material estraño nos cruceiros galegos», añade.

El cruceiro de San Antonio, indica Arribas por otro lado, también es muy especial por su tipología, muy distinta de la mayoría de los monumentos de este tipo. «Posúe uns trazos que non se ven en ningunha outra parte de Galicia, como a figura da cruz, a base do crucifixo e incluso o fuste, que está feito de granito pero que ten unha forma hexagonal moi pouco común», afirma.

Uno de los más antiguos

Otra característica que distingue el cruceiro de San Antonio, explica Fernando Arribas, es que figura entre los más antiguos de los que se han podido datar en Galicia. «Non contén ningunha inscrición que indique o ano no que foi feito, pero pódese deducir que a súa cronoloxía é similar á do desaparecido convento de San Antonio, porque formou parte del», comenta. El convento fue fundado en 1506. «Sería así o máis antigo da provincia xunto co da catedral de Mondoñedo, que tampouco ten inscrición, pero que se pode datar dun xeito análogo», agrega. Junto con ellos -dice asimismo Arribas- figura el cruceiro de la parroquia de San Vicente de Castillón, en Pantón. A diferencia de los anteriores, este sí tiene una inscripción que indica el año en que fue realizado, el de 1610.

Pese a todas estas particularidades, el valor del cruceiro de San Antonio ha pasado siempre muy desapercibido en Monforte, en opinión de Arribas. «Incluso Germán Vázquez e Manuel Hermida Balado, que publicaron excelentes traballos sobre a historia local, só lle deron importancia por ser un dos poucos vestixios materiais que quedan do convento de San Antonio», dice.