Una avería deja a 1.100 familias sin agua en el municipio de O Saviñao

Carlos Cortés
Carlos Cortés MONFORTE / LA VOZ

O SAVIÑAO

Una vecina compra botellas de agua mineral en un supermercado de Escairón, una de las poblaciones que se ha quedado sin traída
Una vecina compra botellas de agua mineral en un supermercado de Escairón, una de las poblaciones que se ha quedado sin traída CARLOS CORTÉS

Las dos bombas de la depuradora municipal se quemaron el domingo de madrugada y solo hay otras iguales en Granada

29 nov 2021 . Actualizado a las 19:22 h.

Una grave avería en la depuradora mantiene fuera de servicio desde este domingo la red municipal de agua potable de O Saviñao. Alrededor de 1.100 familias están sin agua en sus casas y en el Ayuntamiento esperan poden restablecer el suministro el martes por la tarde, pero eso no es del todo seguro. Para poner de nuevo operativas las instalaciones de bombeo de agua es preciso instalar una pieza técnicamente compleja y difícil de encontrar. Tanto que en España solo parece haber una disponible. Y está en Granada.

La estación depuradora de agua potable que alimenta la traída municipal se averió durante la noche del sábado al domingo. La empresa que se encarga del mantenimiento de estas instalaciones recibió mediante un sistema de alerta telemático un aviso de mal funcionamiento a las tres de la mañana del domingo. Las dos bombas que mantienen en funcionamiento la estación se habían quemado y estaban completamente inservibles.

Lo primero que intentaron fue reparar las bombas, pero fue imposible. Poco después, en el Ayuntamiento decidieron activar la traída antigua, la que estaba en servicio antes de que hace cuarenta años fuese construida la nueva. Sin embargo, ese sistema carece de presión suficiente y no es capaz de cubrir la demanda.

El resultado es que este lunes la población de Escairón y todas las parroquias conectadas al sistema de suministro que gestiona el Ayuntamiento se habían quedado sin agua potable. Los vecinos corrieron a proveerse a fuentes y supermercados. A primera hora de la tarde, los supermercados locales no habían agotado sus existencia de agua mineral, pero habían vendido mucho más de lo habitual.

El alcalde, Carlos Armesto, asegura que en cuanto se enteraron de la avería se pusieron a buscar bombas nuevas para sustituir las que se habían quemado para tratar de solucionar el problema cuanto antes. La tarea resultó mucho más difícil de lo que cabría esperar. «Son bombas de 140 cabalos e ninguén ten ese tipo de material fabricado e esperando para vendelo», se lamentaba este lunes por la tarde el alcalde, Carlos Armesto.

Las únicas bombas de esa capacidad disponible que encontraron las tiene una empresa de Granada. En cuanto confirmaron que se trata del material apropiado, los responsables municipales enviaron este lunes dos vehículos con dos conductores a esa ciudad andaluza para que carguen las bombas y las traigan cuanto antes.

Si todo sale bien, los dos conductores estarán de vuelta con las bombas este martes en torno a las doce del mediodía. Después de que lleguen todavía hará falta aproximadamente hora y media de trabajo para conectarlas a la depuradora y ponerla a funcionar. En todo caso, se trata de un trabajo complejo, y no se puede descartar que surja algún problema técnico que lo retrase todo. Como las tuberías de la red se ha quedado vacías y tendrán que irse llenando, en el mejor de los casos el agua no volverá a las casas hasta última hora de la tarde de este martes.

En el Ayuntamiento agradecen la colaboración de los vecinos en una situación tan complicada como esta, en la que falta «un ben de primeira necesidade como é a auga». Los responsables municipales prometen informar a la ciudadanía a través de sus redes sociales y de los medios de comunicación del momento en que el agua vuelva a circular por la traída.

Las razones no se saben

Está claro que la depuradora de agua potable de O Saviñao dejó de funcionar porque sus dos bombas se quemaron. Lo que no se sabe es por qué razón sucedió. Este tipo de averías pueden provocarlas diferentes causas, como un pico puntual de tensión o algún mal funcionamiento del propio sistema eléctrico de las instalaciones.