La Fundación Foggia acaba en el juzgado por el pulso con el albacea

Luis Díaz
luis díaz MONFORTE / LA VOZ

MONFORTE DE LEMOS

En este edificio de la calle Otero Pedrayo se ubica uno de los pisos que dejó en herencia Lilia Foggia
En este edificio de la calle Otero Pedrayo se ubica uno de los pisos que dejó en herencia Lilia Foggia CARLOS CORTÉS

El Ayuntamiento presenta una demanda de conciliación para tratar de desbloquearla

12 ene 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Nueve meses después de la aprobación de sus estatutos, la Fundación Foggia sigue en el aire. La herencia millonaria que dejó María Lucrecia Lilia Foggia para la apertura en Monforte de un centro de atención a mayores sin recursos podría perderse si la entidad encargada de administrar sus bienes no está constituida en julio del 2026. El Ayuntamiento tiene la responsabilidad de dar los pasos necesarios, pero precisa para ello de la autorización del albacea testamentario. La fallecida quiso que ese cometido recayese en el arquitecto monfortino Francisco Cela, contra el que la administración municipal acaba de interponer una demanda de conciliación para que se avenga a firmar la escritura pública que permitiría constituir la Fundación Foggia V. García.

El alcalde dio cuenta de la demanda en el último pleno a raíz de una pregunta del portavoz el BNG, Emilio Sánchez, sobre los trámites para designar al patronato de la fundación. «Neste momento está todo no Xulgado. O Concello non tivo máis remedio que acudir a esa vía para que o albacea firme a escritura de forma voluntaria», explica el alcalde de Monforte, José Tomé. En el pleno celebrado a finales del pasado mes de diciembre, Tomé leyó un informe municipal que reprocha a Cela que mantenga una actitud «obstruccionista» en lo relativo a la ejecución del testamento de Lilia Foggia.

«Despois de varias reunións entre o secretario e o albacea, despréndese claramente que por parte desta persoa un obstrucionismo á execución da vontade da testadora», señala el informe. Desde el punto de vista municipal, el papel del albacea debería limitarse a facilitar que se haga efectivo el testamento. Consultado sobre esta cuestión, Francisco Cela declinó hacer comentario alguno para no enturbiar más una situación de la que dice que no se le puede culpar.

Origen de las discrepancias

Cela no había sido informado por el Ayuntamiento de que los estatutos de la Fundación Foggia V. García —el nombre que dejó estipulado para ella la fallecida— iban a aprobarse en el pleno de abril del pasado año. Fue una persona próxima a Esperta Monforte la que le hizo llegar una copia del texto. La oposición se hizo eco entonces de los recelos del albacea por el procedimiento seguido y optó por abstenerse en la votación de los estatutos.

En aquel debate trascendió que Francisco Cela, en su condición de albacea testamentario, había presentado meses atrás en el Ayuntamiento una serie de sugerencias relativas a la puesta en marcha de la fundación que no habrían sido tomadas en consideración. Sin embargo, contra el acuerdo plenario de aceptación del encargo testamentario y aprobación de los estatutos de la fundación no se presentó recurso alguno y adquirió por ese motivo carácter firme.

 

Un legado millonario para fines sociales aún por cuantificar

María Lucrecia Lilia Foggia era hija de Egildo Foggia, un zapatero italiano afincado en Monforte al que el escritor Antón Patiño Regueira dedica un capítulo del libro Memoria de ferro, inspirado en historias reales de represaliados durante y después de la guerra civil. La madre de Lilia Foggia, María Amalia Vázquez García, era originaria de O Saviñao. Marcharon a Madrid tras una condena contra Egildo Foggia por simpatizar con el movimiento antifranquista, pero todos están enterrados en el cementerio municipal de Monforte.

Aunque Lilia Foggia designó cinco albaceas testamentarios, Francisco Cela es ahora el único encargado de velar por el cumplimiento de su voluntad de costear la asistencia de mayores sin recursos. Uno de los albaceas falleció y cuatro renunciaron por motivos de salud. Solo Cela puede autorizar la escritura pública de la fundación, que administraría un importante legado —todavía por cuantificar— de dinero depositado en cuentas bancarias y pisos y solares en Monforte, Alcalá de Henares, San Sebastián de los Reyes y Bertamiráns.

Un litigio predecible

En el pleno en el que se aprobaron los estatutos, el portavoz del BNG ya alertó del riesgo de acabar en un proceso judicial por el desacuerdo con el albacea, que al parecer considera que la fundación no se ajusta del todo a los objetivos recogidos en el testamento. Nueve meses después, todo apunta a que serán los tribunales los que decidan quién tiene la razón. El Ayuntamiento confirmó que si no hay avances en la conciliación se verá en la obligación de interponer una denuncia contra Cela.

La Fundación Foggia V. García deberá estar constituida antes de julio del 2016, mes en el que su cumplirán diez años de la muerte Lilia Foggia. Así era conocida entre las amistades que mantenía en Monforte, después de que se marchase siendo muy joven a Madrid. El testamento hace alusión explicita a ese plazo para que se cumpla la voluntad de la fallecida. Hasta el 2012, el Ayuntamiento sopesó aceptar o no el encargo testamentario.