La iglesia de San Vicente do Pino, a la espera del arreglo de los destrozos del vendaval de mayo

MONFORTE DE LEMOS

Una parte del tejado de la iglesia tras la tormenta que causó graves daños en mayo del año pasado
Una parte del tejado de la iglesia tras la tormenta que causó graves daños en mayo del año pasado CEDIDA

La rehabilitación del interior del templo acaba de terminar, pero ahora hay que reparar los serios daños que sufrió la cubierta hace ocho meses

21 ene 2021 . Actualizado a las 10:24 h.

Las obras de rehabilitación del interior de la iglesia de San Vicente do Pino acaban de terminar —si bien aún no se han recibido oficialmente—, pero todavía están pendientes de arreglar los graves daños que sufrió la cubierta del edificio durante el fuerte vendaval que azotó Monforte de Lemos el 4 de mayo del año pasado y que causó múltiples destrozos en diversas partes del casco urbano. El delegado de patrimonio histórico del obispado lucense, César Carnero, señala que la Dirección Xeral de Patrimonio Cultural se ha comprometido a realizar esta obra, pero aún no se ha formalizado un acuerdo para llevarla a cabo, algo que se espera resolver en breve plazo.

Carnero señala que la reparación de la cubierta necesitará una inversión importante —de en torno a 100.000 euros—, ya que será preciso renovar la totalidad de las tejas. Muchas de ellas fueron arrancadas por el viento y acabaron en el suelo, mientras que otras quedaron rotas o inestables. Asimismo, habrá que reponer algunas planchas de fibrocemento que forman parte de la techumbre y que quedaron muy dañadas por los golpes de las tejas.

En estas planchas se abrieron varios boquetes que dejaron pasar la lluvia y que fueron tapados en una intervención de urgencia poco después de que se produjesen los daños. «A cuberta non deixa pasar auga, pero as pranchas deterioradas teñen que ser substituídas para asegurar a impermeabilidade —explica Carnero— e as tellas deben ser repostas porque tal como están agora supoñen un risco, non só para o edificio senón tamén para a seguridade das persoas».

Por otro lado, también será necesario renovar la iluminación del interior del templo, algo que no estaba incluido en las obras de rehabilitación que acaban de concluir. «As luminarias que había ata agora foron retiradas porque estaban moi anticuadas e non servían para iluminar adecuadamente a igrexa no estado en que quedou despois da restauración», dice a este respecto César Carnero. Las únicas luces que se han conservado son las de las capillas de la Virgen de Montserrat y del retablo de san Benito. El delegado de la diócesis señala a este respecto que se entrevistará con representantes del Instituto del Patrimonio Cultural de España —entidad dependiente del Ministerio de Cultura que se encargó de la rehabilitación del interior del templo— a fin de recabar apoyo económico para instalar una iluminación artística «acorde co valor das pinturas murais e doutros elementos con que conta esta igrexa».

Los trabajos de rehabilitación que se han llevado a cabo en la iglesia de San Vicente do Pino afectaron a un importante conjunto de pinturas murales del siglo XVI, situado en el muro norte del crucero, que formó parte del mausoleo cuarto conde de Lemos. También se restauraron otras pinturas murales ubicadas en la cabecera de la iglesia, una obra de la década de 1920 que sufrió un fuerte deterioro a causa de las filtraciones de humedad.

Según apunta César Carnero, el resultado de la restauración de los murales más antiguos, así como la del retablo mayor de la iglesia, puede calificarse de «espectacular» e incrementará en gran medida el atractivo artístico e histórico del templo cuando sea reabierto. «Nas pinturas da cabeceira o resultado non foi tan satisfactorio porque estaban moi degradadas e as técnicas actuais de restauración non permiten ir máis alá do que se fixo», añade.

Por ahora no se ha decidido cuándo se podrá abrir de nuevo la iglesia para celebrar actos religiosos y para recibir visitantes. «En primeiro lugar temos que recibir oficialmente a obra terminada e despois hai que instalar a nova iluminación, aparte de reparar os destrozos da cuberta», indica Carnero. «Pero esperamos que a igrexa poida estar disponible de novo a finais da primavera», agrega.