Los jardines de la edificación del entonces regidor eran lugar de diversión de los hidalgos locales
08 mar 2020 . Actualizado a las 05:00 h.La casa de Mendo Alonso, en la calle Falagueira, era una de las principales de la villa de Monforte a comienzos del siglo XVI. Mendo era regidor del concejo monfortino, y contador mayor de los condes de Lemos. En la llamada «casa con vergel», cuya ubicación hoy no se puede concretar, se reunían con frecuencia, entre otros, los también regidores de la villa Jorge de Gaibor, Alonso Baanante, Francisco de Escobar y Gonzalo de Estrada; el alcalde de ordinario Juan Díaz de Freijo; el procurador Diego Álvarez, conocido platero monfortino; el escribano Cristóbal de Córdoba; y el bachiller Olea, preceptor de los hijos de la tercera condesa de Lemos.
Cristóbal de Córdoba y Jorge de Gaibor fueron dos destacados judeoconversos monfortinos con diferente fortuna en su devenir y relación con la Inquisición. El primero no fue acusado por ella, pero Jorge de Gaibor sí y llegó a verse obligado a ir a Valladolid en el año 1539 para presentarse ante el tribunal inquisitorial. En ese momento no se encontraba establecido todavía el de Santiago.
Antonio de Olea dejó escrita una crónica sobre aquellas reuniones en la Falagueira en la que se puede leer: «Jugaban a los bolos muchos de la villa además de vino y dinero, y otras cosas, es cosa de mucho ver, i juéganlos en un vergel, que tiene la misma casa». El vergel de la casa de la Falagueira, en aquella época calle principal de Monforte, consistía en un jardín con gran abundancia y variedad de árboles y flores.
Antonio de Olea y Mendo Alonso mantenían por sus respectivas ocupaciones una estrecha relación personal. El hecho de que Mendo Alonso fuese el contador mayor de la tercera condesa de Lemos, y que esta tuviese en su casa al referido bachiller Antonio de Olea, conllevó lazos de amistad entre ambos. Olea nace en Villalpando en el año 1482 y viene a Galicia en 1510. Diez años después se instala en Monforte acompañando a Don Álvaro Osorio, segundo esposo de la tercera condesa doña Beatriz de Castro Osorio, llamada A Fermosa.
El bachiller Olea dejó abundantes notas en los espacios en blanco de uno de los libros que utilizaba habitualmente para enseñar a los hijos de los condes de Lemos. Entre sus alumnos destaca Fernando Ruiz de Castro (1505-1576), con el tiempo cuarto conde de Lemos primer marqués de Sarria y grande de España. También estuvo a su cargo Rodrigo de Castro (1523-1600), cardenal que a la postre sería fundador del Colegio de Nuestra Señora de la Antigua.
Un raro ejemplar
Sobre uno de los volúmenes de la tercera edición de Geografía de Tolomeo, publicada en Lyon en 1535 por los hermanos Melchor y Gaspar Trechsel y editada por Miguel Servet, redactó notas de naturaleza dispar que nos permiten tener noticias de gran interés de nuestra población hace quinientos años. Este ejemplar, que formaba parte de los fondos bibliográficos del estudio que le habilitaron en el palacio condal monfortino, es uno de los pocos que se conservan y se custodia actualmente en la biblioteca provincial de Lugo.
Sabemos que en el año 1528, el bachiller Olea era alcalde mayor de la villa por el conde y la condesa de Lemos, y Mendo Alonso regidor del ayuntamiento. El alcalde mayor era nombrado en aquel momento por el conde de Lemos y desempeñaba un cometido principalmente de tipo judicial. A partir de la primera parte del siglo XVI serán letrados los que desarrollaban estos cargos y recibían en muchos documentos la designación de «jueces de letras».
«Jugaban a los bolos muchos de la villa, además de vino y dinero», dice una crónica
Hidalgos libres de impuesto, un privilegio vetado para los que tenían pasado judío
En un padrón de la villa de Monforte correspondiente al año 1558 se aprecia que la inmensa mayoría de los titulares de los cargos asociados por aquel entonces al concejo de Monforte -alcalde mayor y de ordinario, regidores, procurador, secretario- figuraban entre los «hidalgos notorios o por privilegio» y estaban por ello exentos del pago de impuesto. La única y destacada excepción era el de la familia judeoconversa monfortina que llevaba el apellido Gaibor. Pese a que sus integrantes ostentaban responsabilidades relevantes, no tenían la condición de hidalgos por su pasado judío y pagaban importantes sumas.
Francisco de Gaibor, nieto de Juan de Gaibor, tronco de la familia judeoconversa monfortina e hijo de Jorge de Gaibor, era en 1558 el alcalde de ordinario de la villa monfortina. Su hermano Juan de Gaibor era en ese año regidor de la villa.
Propiedades y riquezas
Entre los exentos de pago por su condición de hidalgos estaban Francisco de Escobar, regidor de la villa de Monforte en el año 1532; el licenciado Olea, alcalde mayor en 1528; Alonso Basante, alcalde de ordinario en 1528 y regidor de la villa en 1532; y el hidalgo Álvaro Belón, que se cita en un documento del año 1528. Cristóbal de Córdoba, también exento del pago, aparece firmando como secretario desde finales del siglo XV hasta mediados del siglo XVI.
También estaban libres del pago de impuesto otros muchos hidalgos y «caballeros notorios» por su condición social propiedades y riquezas. Entre ellos aparecen reseñados en la documentación de la época el licenciado Fernán López, médico exento por privilegio; y Juan Díaz, platero, hidalgo exento del pago, que se cita en el año 1532.