Sheila Otero, Juan Penoucos y Víctor Frontera compiten en el multiusos
04 oct 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Desde hace años, el culto al cuerpo se ha convertido en una afición, lo que se ha traducido en un auténtico bum tanto de las artes marciales como del culturismo. En este segundo apartado, el Gimnasio Lemos fue pionero en la Ribeira Sacra.
Su propietario, Alejandro Caride comenzó su andadura hace 31 años y durante ese tiempo han pasado por su gimnasio numerosos culturistas, que no solo han ganado campeonatos de España y gallegos, sino que compitieron al más alto nivel en mundiales y en europeos.
Este fin de semana, los aficionados monfortinos podrán disfrutar de esta modalidad deportiva, puesto que mañana se disputa en la ciudad del Cabe la quinta copa Galicia de físicoculturismo y el cuarto Open Regional Concello de Monforte.
Entre las doce y media del mediodía y las tres de la tarde competirán en el Multiusos una treintena de deportistas. La representación monfortina la ostentarán tres competidores del Gimnasio Lemos. Son Sheila Otero, Juan Penoucos y Víctor Frontera, que tratarán de acceder al podio.
Las sensaciones a falta de 24 horas para que se dispute este campeonato son positivas, tal y como asegura Alejandro Caride. «Tenemos opciones de medalla, porque los tres afrontan este campeonato en óptimas condiciones. Aunque es la primera vez que compite, Sheila es clara favorita para llevarse la victoria. Juan y Víctor tendrán mucha competencia, pero cuentas con posibilidades de medalla», señala Caride.
Esta es la tercera competición oficial de estas características que organiza el Gimnasio Lemos en Monforte. La primera vez fue en el año 1990 y la segunda en el 2002, con un gran éxito de participación. «Espero que sea del mismo nivel que las dos anteriores. Será todo un espectáculo presenciar la puesta en escena de estos grandes deportistas», concluye Alejandro Caride.
La mayoría de los usuarios que pasan por el Gimnasio Lemos tienen contacto, por lo menos en algunas fases de su preparación, con el culturismo. A algunos los engancha, lo que hace que apuesten por perfeccionarlo y después dar el salto a la competición oficial. El futuro está garantizado en el Gimnasio Lemos.