A juicio por perpetrar 27 robos en coches y casas de Monforte en un año y medio

Carlos Cortés
Carlos Cortés MONFORTE / LA VOZ

MONFORTE DE LEMOS

ROI FERNANDEZ

Le piden  cerca de ochos años de prisión. La policía lo detuvo porque un transeúnte lo vio intentando robar en una furgoneta aparcada en la calle

01 may 2019 . Actualizado a las 19:23 h.

Un vecino de Monforte se enfrenta a una posible condena de cerca de ocho años de cárcel como responsable de una ola de robos que se produjo en esta localidad en un período de apenas dieciocho meses. El objetivo del ladrón eran sobre todo casas y coches aparcados en la calle o en garajes. Llegó a cometer cuatro robos en una sola noche.

Aquella sucesión de robos se produjo entre octubre del 2010 y marzo del 2012, cuando el sospechoso tenía 38 años. Lo detuvieron después de que un transeúnte lo viese en actitud sospechosa dentro de una furgoneta estacionada en la calle, pocas horas después de que tuviese que escapar a la carrera tras ser sorprendido con las manos en la masa por los dueños de una casa en la que había entrado a robar. Cuando los agentes que respondieron a la llamada que el transeúnte hizo al 091 cacheaban al sospechoso en la calle, pasó por allí casualmente el dueño del piso y lo reconoció.

Siete años después de aquello, la Fiscalía considera a P.F.V.. responsable de dos delitos distintos, uno de robo con fuerza en las cosas y otro de robo en casa habitada, los dos en la modalidad de delito continuado. Por el primero pide una condena de tres años y por el segundo otra de cuatro años y ocho meses. Además, el Ministerio Público pide al tribunal que lo condene a compensar a las víctimas de los robos con diferentes indemnizaciones equivalentes al valor de los objetos que sustrajo, que en conjunto suman 1.600 euros. Una buena parte de los afectados han renunciado a cobrar ninguna compensación.

El primer robo que le imputa la Fiscalía fue el perpetrado a las nueve de la noche del 20 de octubre del 2010 en la oficina local de Cáritas. El ladrón rompió una ventana con un destornillador y una vez dentro se llevó una impresora. En una parte de los robos en coches por los que está acusado, no encontró nada de valor pero aún así siempre se llevaba algo, aunque solo fuese la documentación del vehículo. El único delito de esta serie que le imputan que se produjo fuera de Monforte fue el robo de un coche en Ourense. Su dueña lo recuperó poco después, pero con algunos destrozos en la carrocería.