La cota de nieve bajó durante la noche hasta los 600 metros de altitud
18 ene 2023 . Actualizado a las 10:37 h.Este martes amaneció cubierto de blanco en buena parte del sur de Lugo. La cota de nieve, que el lunes se había mantenido en torno a los 700-800 metros la mayor parte del día, bajó durante la noche hasta los 600. La lluvia que está cayendo esta mañana lo hace en forma de nieve en buena parte del territorio. Hay problemas para circular en todas las carreteras de montaña, pero también en alguna de la red principal, como el corredor Monforte-Lalín en el Alto do Faro, entre Chantada y Rodeiro.
En la mitad sur de Lugo, la nieve solo había provocado el lunes problemas para circular por las carreteras que pasan por las zonas altas de los municipios de Folgoso do Courel y Quiroga. Quince carreteras de la red de la Diputación estuvieron total o parcialmente restringidas al tráfico buena parte del día en estos dos municipios. Este martes parece que va a ser distinto, porque la nevada es más generalizada.
A primera hora de la mañana, la Dirección General de Tráfico (DGT) no informaba de ninguna carretera cortada en la red principal de la mitad sur de Lugo.
En todo caso, nieva de forma intermitente en los tramos más altos de los corredores de Monforte a Lugo y de Monforte a Chantada.
En la subida por el corredor Monforte-Lalín al Alto do Faro desde esta última localidad había que extremar la precaución a primera hora porque la nevada estaba siendo intensa. En esta misma carretera también nieva de forma intermitente a la altura de Escairón.
En cuanto al corredor Monforte-Lugo, también hay nieve en el Alto de Oural, entre los municipios de O Incio y Sarria.
El primer día de nieve cerró carreteras de montaña en Folgoso y Quiroga
Ayer, el Miño pasó por la ciudad de Lugo como pocas veces han visto sus habitantes en los últimos años. El caudal del río, que se encuentra aún totalmente desbordado, avanza decenas de metros por su lecho, alcanzando zonas que rara vez había tocado el agua.
La peor parte se la están llevando los barrios y las edificaciones de la zona de A Ponte y San Lázaro. Allí, la carretera está apenas unos metros por encima del nivel habitual del río. Ahora, se encuentran completamente inundadas. «Hacía mucho tiempo que no veía nada así», comentaba ayer un vecino, mientras observaba cómo el agua saltaba una calzada junto al río.