La caída en el número de nacimientos es superior y más generalizada que la que experimenta la población general
08 ene 2022 . Actualizado a las 18:30 h.No es ninguna novedad que en el sur de Lugo nacen hoy muchos menos niños que en los tiempos del baby boom, que los expertos suelen situar en España entre mediados de los años 50 y mediados de los 70. Lo que no se conoce tanto es la traducción en cifras concretas de ese declive. Las estadísticas oficiales disponibles hoy permiten remontarse a 1975, en los últimos años de aquella etapa de veinte años de crecimiento demográfico acelerado. En los 45 años que median entre 1975 y el 2020, el bajón es de casi el 70%. En 1975 nacieron en los municipios que hoy forman las comarcas de Lemos, Sarria, Chantada y Quiroga un total de 1.081 bebés. En el 2020 fueron 330.
La cifra de los nacimientos refleja la envergadura de la crisis demográfica en esta parte del interior de Galicia mejor todavía que los números de la población total. El número de residentes también cae en estos 45 años, pero lo hace de forma más irregular. En general, las principales cabeceras de comarca resisten, porque a pesar de que no crecen tampoco se hunden, en parte por la migración interior desde los municipios pequeños a esas localidades en las que se concentran los servicios. En cambio, el bajón de los nacimientos es general, aunque resulte mucho más acusado en los municipios pequeños.
Las estadísticas dicen que el comportamiento de este factor demográfico es similar en las cuatro comarcas de la mitad sur de Lugo. El número de nacimientos cae en estos 45 un 73% en la comarca de Quiroga, un 69% en las comarcas de Lemos y Sarria, y un 68% en la de Chantada. Por municipios, cuanto mayor es la población menos malos son los datos.
Monforte
Por primera vez, menos de 100. En el caso de Monforte, primera localidad más poblada en esta zona y segunda en el conjunto de la provincia, en 1975 vio nacer a 182 bebés y en el 2020 solo a 96. En la evolución de los datos de Monforte de lustro en lustro se aprecia que en los años 70 el número de partos todavía tendía al alza, que en los 80 retrocedió y que entre los 90 y el 2015 se mantuvo, con algunas subidas ligeras y algunos retrocesos también menores. La situación parece haber empeorado en los últimos años. Nunca hasta ahora se había bajado en Monforte de la barrera de los cien nacimientos anuales, pero a partir del 2015 eso pasó en más de una ocasión. La última vez, en el 2020, cuando Monforte se quedó a cuatro bebés de los 100.
Esa diferencia tan grande entre el desplome en el número de nacimientos y el mantenimiento de las cifras generales de población tiene que ver con el retraso generalizado de la edad a la que se tienen hijos y con la paulatina desaparición de las familias numerosas. Pero probablemente también se explique por la emigración en busca de oportunidades laborales de jóvenes en edad de procrear.
Sarria
Un crecimiento trucando en el 2020. El panorama de Monforte se reproduce poco más o menos en Sarria, un municipio que en los últimos 45 años no pierde población, sino que la gana. Y a pesar de eso, no es capaz de sostener en el tiempo el número de nacimientos. En Sarria, la caída en el número de partos fue continuada entre 1975 y el 2005, pero la tendencia se invirtió entre ese año y el 2015, cuando en el municipio nacían cada vez más bebés. En el 2015, Sarria parecía enfilada hacia una estabilización de los nacimientos por encima de los 100 al año, pero ese crecimiento se truncó de nuevo en el 2020. Ese año, Sarria se quedó con solo 81 nuevos bebés, un 53% menos que en 1975.
Chantada
Un crecimiento trucando en el 2020. El municipio de Chantada sumó en 1975 un total de 119 recién nacidos a su padrón de habitantes. En 1980 fueron 104, pero a partir de entonces ya no volvería a alcanzar los 100. A partir de ahí, las bajadas fueron discretas pero sostenidas, con algunas excepciones entre el 2005 y el 2010, en los que hubo leves subidas. En el 2020, nacieron en Chantada 48 bebés, un 59% menos que 45 años antes. Eso sí, ese año fue la única de las cabeceras de comarca del sur de la provincia de Lugo que no empeoró sus cifras con respecto a cinco años antes, porque en el 2015 habían sido 44, cuatro menos.
Quiroga
Un crecimiento trucando en el 2020. En Quiroga sumaron a la población local un total de 47 recién nacidos en 1975. En los años 90 no llegaban a 30 y en los primeros 2000 bajaron incluso de 20. Las cosas mejoraron un poco en el paso de la primera década del siglo XXI a la segunda, porque en el 2010 el número de partos de mujeres empadronadas en Quiroga subió hasta los 24. Sin embargo, esa tendencia no se mantuvo. En el 2015 volvían a ser 14 y en el 2020 subieron, pero no lo suficiente como para pasar de veinte, y se quedaron en 19.
Los más pequeños
Menos bebés y menos población. Si en Monforte y en Sarria la caída en el número de nacimientos contrasta con el mantenimiento, o incluso, el crecimiento de la población total, en los municipios más pequeños las dos cosas van parejas: caen a marchas forzadas la población y también los partos. Entre 1975 y 1985, ninguno de los municipios de las comarcas de Lemos, Sarria, Chantada y Quiroga tenía menos de 10 bebés nuevos al año. Desde mediados de los años 80, eso ha dejado de ser una excepción para convertirse en la norma. Hoy por hoy, en la comarca de Lemos solo la cabecera y O Saviñao superan esa cifra. En la de Sarria, solo lo logran la cabecera y Láncara. En la de Chantada pasan de esa cifra Chantada y Taboada. Y en Quiroga, solo este municipio. Eso si, en el 2020 ninguno de los 19 municipios que forman estas cuatro comarcas se quedaron en blanco. En todos nació algún niño. Los que estuvieron más cerca de no sumar ninguno fueron A Pobra do Brollón, O Páramo y Ribas de Sil, con solo dos en cada uno.