Por el aspecto que presentaban los restos cuando fueron encontrados no parece que llevasen mucho tiempo tiradas en ese lugar. No parece que las cabezas estuviesen sin piel por efecto de las alimañas, porque no había restos hechos jirones ni tenían huellas aparentes de mordiscos. Da la sensación de que fueron despellejadas mediante algún procedimiento industrial.
Esta es la segunda vez en los últimos cuatro años que aparecen cabezas de vacas abandonadas en el municipio de Carballedo. En octubre del 2018, personal del Ayuntamiento encontró por casualidad 15 cabezas que alguien había tirado en el río Búbal, en la base de un puente cerca del lugar de A Tolda, en la parroquia de Aguada. En aquel momento, en el Ayuntamiento admitieron su asombro por un hecho para el que no encontraban explicación. En aquella parte del municipio no había ninguna explotación ganadera ni ningún matadero.