El Ayuntamiento quiere renovar ahora 379 puntos de luz en Bóveda, Rubián, Ver y el polígono industrial
18 feb 2020 . Actualizado a las 20:00 h.El Ayuntamiento de Bóveda espera conseguir más financiación del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) para avanzar en la renovación de su alumbrado público. El Gobierno local anunció este martes que su plan pasa, entre otras medidas, por sustituir con luces led más de 370 farolas en los núcleos de Rubián y Bóveda. El coste estimado de este proyecto es de 184.737 euros. El Ayuntamiento ya aplicó hace poco un plan de renovación del alumbrado que supuso una inversión de 225.470 y permitió modernizar 432 puntos de luz, lo que supondrá una rebaja de un 73% en la factura que paga por su consumo eléctrico.
Para conseguir financiación para este nuevo plan, los responsables municipales han decidido acogerse a la convocatoria de ayudas del año 2017 que regula la concesión directa de subvenciones a proyectos de entidades locales que favorezcan el paso a una economía baja en carbono. El proyecto para el que el Ayuntamiento pide estas ayudas incluye la sustitución por tecnología led de las luces de 379 farolas, la reforma de seis cuadros eléctricos y la instalación de 4.400 nuevos metros de cable. Según los cálculos técnicos previos, todo esto permitirá reducir un 57,2% el consumo eléctrico del Ayuntamiento en alumbrado público.
Cuatro calles y el polígono
Estos trabajos de renovación del alumbrado se llevarán a cabo en la avenida de San Vicente, en Ver; en la avenida Alfonso XIII y el polígono industrial, en Bóveda; y en las avenidas de Galicia y de Santiago, en Rubián. Lo que está previsto hacer en concreto es reformar los cuadros de mando y protección y sustituir las luminarias, los soportes en los casos que sea necesario y parte del cableado. También se aprovechará para comprobar el estado de otros elementos del alumbrado, así que el resultado será que la instalación quedará renovada prácticamente por completo.
Este proyecto incluye además un ahorro adicional en mantenimiento, porque los equipos a instalar tienen un período de garantía de al menos cinco años, ampliables a diez durante el proceso de adjudicación, y además porque las instalaciones renovadas exigen un mantenimiento menor.
El Ayuntamiento tiene que aportar fondos propios para cubrir el 20% del coste toda de estos trabajos. Los responsables municipales calculan que el ahorro derivado de la reducción de consumo y de la rebaja de costes de mantenimiento permitirá compensar esa aportación en aproximadamente dos años.