
La bodega de Sober Val da Lenda gana con la marca Antiquus las medallas de oro a la etiqueta y embalaje más cuidados en un concurso internacional
17 jun 2025 . Actualizado a las 19:12 h.¡Un vermú que sabe a vino! Para muchos de los visitantes de la bodega de Sober Val da Lenda, situada en el corazón de la subzona de Amandi, ese parentesco gustativo constituye toda una sorpresa. Para el elaborador, Víctor Rodríguez López, lo raro sería justo lo contrario: «Se está feito de viño, por forza ten que saber a viño». Antiquus, su vermú elaborado con tinto de mencía, comenzó a comercializarse las pasadas Navidades tras cinco años de experimentos y «un cúmulo de casualidades». En la última edición del World Vermouth Awards, concurso internacional celebrado recientemente en Londres, obtuvo medallas de oro por el diseño de la etiqueta y el estuche en el que se comercializan las botellas al precio de 30 euros.
En la página web del concurso internacional lo definen como un vermú «con un marcado carácter vinícola», de «magnífico color rojo intenso y ricos aromas a ciruelas, pasas y frutos rojos, complementados con ligeras notas herbáceas». En boca, el jurado apreció «un perfil dulce y afrutado con toques especiados y naranja, contrastados por una acidez y un amargor secos». «Na cata, polo que nos dixeron, prexudicouno a fase visual. Con algo máis de brillo houbese tido unha puntuación moi boa. Podíase solucionar cun filtrado, pero se o filtras tamén lle quitas outras cousas», explica el bodeguero.
Víctor es la segunda generación de la bodega Val da Lenda fundada por sus padres, José Rodríguez y Laura López, en los inicios de la denominación de origen. Comenzaron elaborando un único vino, un tinto del año de mencía. Ahora producen también un godello y un tinto con crianza bautizado como Sete Tolos, homenaje a los precursores del actual consejo regulador de Ribeira Sacra. José Rodríguez, conocido en la zona por Pepe de Cantón, era uno de ese grupo de «tolos» que creyeron en el futuro de esta zona vitícola cuando muy pocos apostaban por ella.
Mejor que hacer rosado
Otras marcas de Ribeira Sacra prefirieron, en tiempos más recientes, diversificar su oferta con la elaboración de rosados. Sin embargo, en Val da Lenda no acababan de ver claro el potencial de la mencía para es tipo de vinos. Probaron entonces con el vermú, que en una primera versión era blanco y de godello. «Tamén gustaba moito —explica Víctor—, pero viño branco producimos pouco e decidimos probar coa mencía». Bodeguero y enólogo —Julio Ponce— diseñaron con está última variedad un vermú muy versátil, que muchos clientes eligen para la sobremesa, en vez de para el aperitivo, por su similitud con los oportos.
Antiquus sigue el patrón habitual de este tipo de elaboraciones. El vino base se encabeza con alcohol vínico de la mejor calidad para que alcance los 15 grados, y se macera un tiempo con hierbas y especias antes de su embotellado. «A alquimista —precisa el bodeguero— é miña nai». El resultado poco tiene que ver con los vermús convencionales y esta circunstancia posiblemente haya contribuido a su buena acogida por parte de clientes de procedencias muy dispares.
«É raro que cando veñen visitas á adega non se leven algunha botella. Á xente encántalle e a marca vai ter continuidade», dice Víctor. De esta primera tirada se produjeron mil litros de vermú, unas 1.500 botellas. La entrega de premios tendrá lugar próximamente en una cena de gala en un hotel de Londres al que el bodeguero excusó su asistencia. El esmoquin, comenta sonriente, no es lo suyo.