¿Quién gana en el Ayuntamiento con el nuevo marco laboral?

Luis Díaz
LUIS DÍAZ MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

Monforte desempolva la relación de puestos municipales después de 17 años

08 oct 2022 . Actualizado a las 17:09 h.

Como una serpiente de verano, las siglas «RPT» acaparan cada cierto tiempo la actualidad política en Monforte. Esas iniciales corresponden a la relación de puestos de trabajo municipales, un instrumento obligatorio del que carecía el Ayuntamiento cuyo objetivo es adecuar la estructura de personal a sus necesidades de servicio. La RPT identifica cada puesto, las funciones que corresponden a su desempeño, la cualificación necesaria para ocuparlo, el horario laboral... Y, lo que es más importante, fija complementos que llegan a marcar importantes diferencias salariales. Diecisiete años después de que naufragase el último intento de aprobar este marco laboral, el equipo de gobierno se dispone a llevar su propuesta a pleno. Tiene la mayoría necesaria para sacarla adelante, pero la polémica está servida con la mayor parte de los sindicatos.

La intención del gobierno local es aprobar la relación de puestos de trabajo en el pleno este mismo mes. Los partidos de la oposición disponen de la documentación desde el pasado miércoles, cuando tuvo lugar la primera mesa de negociación. Ningún grupo político se pronunció todavía al respecto. Por su parte, CC. OO., CIG y CSIF prefieren hablar de una «mesa de imposición» y rechazan de plano la propuesta que les fue presentada por la primera teniente de alcalde y concejala de Facenda e Réxime Interior, Gloria Prada, y por el secretario municipal, José Antonio Mourelle.

La mayoría, funcionarios

La RPT que va a aprobar el equipo de gobierno afecta a 57 funcionarios municipales y a otros 47 trabajadores catalogados como personal laboral. El documento incluye una ficha de cada puesto que valora con arreglo a diferentes parámetros —grado de responsabilidad, atención al público, nivel de mando— los correspondientes complementos específico y de destino. Ahí surgen las discrepancias. Hay quien mejorará hasta ver incrementada su nómina en alrededor de 6.000 euros anuales, confirman fuentes sindicales. Otros, por el contrario, podrían perder poder adquisitivo a medio plazo.

A los trabajadores que salen perdiendo con la valoración de sus cometidos en la relación de puestos de trabajo no se les podrá rebajar el sueldo que venían percibiendo. Esa posibilidad está descartada por ley, pero la normativa sí autoriza a pagar la diferencia salarial derivada de la rebaja de categoría mediante un «complemento personal transitorio». ¿Problema? A esa parte de la nomina no se le podrán aplicar futuras actualizaciones del IPC. Los sindicatos observan agravios comparativos en la propuesta y creen que se habrían evitado «sospechas» de haberla encargado a una consultora externa. Los procesos de elaboración de las RPT siempre son conflictivos y Monforte no es la excepción. «Hai que intentar contentar ao maior número de xente posible, pero neste caso non se deu esa circunstancia», apuntan desde un sindicato.