La antigua fortaleza medieval pasa a ser propiedad municipal salvo en la parte que cedió la Casa de Alba a Turespaña
01 feb 2022 . Actualizado a las 19:05 h.Punto y final a la historia interminable de idas y venidas sobre la titularidad de la muralla medieval de Monforte. La antigua fortaleza que circunda el conjunto monumental de San Vicente va a ser inscrita en su mayor parte en la lista de bienes del Ayuntamiento. Solo quedará fuera el tramo más próximo al Parador de Turismo, que cedió la Casa de Alba a Turespaña en el 2003. En el primer pleno de este año, la corporación local acordó por unanimidad dar de alta este monumento en el inventario de propiedades municipales. El alcalde, José Tomé, asegura que no se trata de un simple trámite. «Se damos este paso é para algo. Algo vai cambiar, que ninguén o dubide», dice Tomé.
Asumir la titularidad de la fortaleza implica aceptar también la responsabilidad de su recuperación, asignatura pendiente en sus más de 800 metros de perímetro con la excepción del tramo que discurre paralelo a la calle Santo Domingo. La Xunta se hizo cargo de su reconstrucción en el 2006, años después de un aparatoso derrumbe que taponó este acceso al conjunto monumental con más de mil metros cúbicos de escombros. A través de la escuela taller municipal, la restauración del lienzo se completó en esa misma época entre los torreones de la cárcel vieja y Santo Domingo.
Plan director sin iniciar
Desde el año 2008, la Consellería de Cultura dispone de un plan director para la recuperación de la muralla —elaborado bajo la dirección del arquitecto José María Alonso Montero— que plantea acometerla por tramos para que pueda resultar viable económicamente. Ese plan, sin embargo, nunca llegó a traducirse en partidas específicas en los presupuestos autonómicos. Así las cosas, el Ayuntamiento se cuidó de no cargar con la patata caliente que supondría incorporar el monumento al listado de propiedades municipales.
Los redactores del plan especial de protección del conjunto histórico pusieron sobre el papel esa posibilidad en su redacción inicial, pero quedaría descartada a raíz de una alegación del propio gobierno local. Antes de su aprobación definitiva, el proyecto daba por sentada la titularidad municipal de una amplia superficie de la muralla que incluiría la Porta Nova, la Porta da Alcazaba y los lienzos de la Torre do Arco, Santo Domingo y O Cárcere Vello. El plan ahora en vigor se sometió a exposición pública por vez primera en agosto del 2017 y solo tres meses después el pleno de la corporación aprobaba un acuerdo de cesión del monumento a la Xunta.
Si el Gobierno gallego objetaba sistemáticamente que no podía restaurar la fortaleza porque no era suya, se le cedía su titularidad y asunto resuelto. Pero la Xunta nunca se dio por enterada del acuerdo plenario que se le hizo llegar entonces y el Ayuntamiento entiende que el «silencio administrativo» supone la negativa de hacerse cargo de ese bien de interés cultural. Agotada esta vía, y tal como sugería el plan especial, la muralla se incorporará finalmente al inventario de bienes municipales.
Necesario para pedir ayudas
«Para realizar accións de mantemento de cara ao futuro, como establece o plan especial, haberá que contar con axudas doutras administracións. E para pedir unha subvención hai que acreditar que es titular dese ben», explica el alcalde. El tramo que se escriturará, según avanza, arranca en las proximidades de la Porta Nova y discurre por debajo de la Falagueira, la Porta de Pescaderías y Santo Domingo hasta la Torre dos Cregos, a al altura del Campo da Virxe.
El Estado proyecta restaurar el tramo que forma parte del Parador de Turismo
Técnicos de Turespaña visitaron Monforte a comienzos del 2019 para valorar sobre el terreno la restauración de la parte de la muralla que forma parte del recinto del Parador de Turismo. Ese proyecto salió a relucir de nuevo en abril del pasado año, con motivo de una reunión entre el alcalde de Monforte y el presidente de Paradores, Óscar López. De llevarse a la práctica, se traducirá en la recuperación del tramo de la antigua fortaleza que va de la Torre dos Cregos, cerca del restaurante O Grelo, a la parte próxima a la Porta Nova que atraviesa la zona ajardinada propiedad del alojamiento.
La inscripción del resto de la muralla como bien municipal sería un primer paso para que el Ayuntamiento consiga la financiación necesaria para poder dar continuidad a ese proyecto en tramos contiguos. El despegue turístico de la Ribeira Sacra estaría, por otra parte, detrás de la decisión del equipo de gobierno de inventariar el monumento. Paradores considera muy relevante el tirón del alojamiento ubicado en el conjunto monumental de Monforte entre el turismo internacional.
Patrimonio nacional en 1949
La protección de la antigua muralla medieval de Monforte data de 1949. Ese año fue declarada patrimonio nacional con arreglo a un decreto estatal que estipulaba el máximo nivel de protección para todos los castillos que se conservaban en España. La vieja fortaleza sufrió importantes daños desde el momento en que perdió su utilidad defensiva. La Casa de Alba, heredera de los bienes de los condes de Lemos, tuvo que tomar medidas a comienzos del siglo XVIII para evitar el expolio de la piedra para edificar otras propiedades. Pese a todo ello, el plan director que encargó la Xunta carga las tintas en que corrió mejor suerte que otras fortalezas de Galicia y podría recuperarse casi en su totalidad mediante una planificación adecuada.