Un 30% de los cinco millones de kilos de uva recolectados en lo que va de campaña entraron en las bodegas en los tres primeros días del mes
04 oct 2021 . Actualizado a las 19:15 h.El techo de los seis millones de kilos de uva que se había marcado el consejo regulador al comienzo de esta campaña vitícola parece a tiro tras el primer fin de semana de octubre. Según los datos de vendimia que se dieron a conocer este lunes, en la denominación de origen ya se recogieron 5.023.144 kilos de uva. Septiembre pasó página en el calendario con 3,5 millones de kilos de uva recolectados, por lo que entre el viernes y el domingo entraron en las bodegas de Ribeira Sacra 1,5 millones de kilos, un 30% del total contabilizado hasta la fecha.
A partir de ahora, señala el consejo regulador, Ribeira Sacra encara la recta final de la vendimia que arrancó oficialmente el 15 de septiembre, cuando se habían recogido 62.000 kilos de uva con autorizaciones puntuales. Aunque el cierre podría ir unos días más allá del siguiente fin de semana debido a algún viñedo rezagado, los datos definitivos apenas diferirán de los que se contabilicen el próximo domingo. En estos momentos hay 43 bodegas que dieron por acabada la campaña y 46 que todavía están recogiendo uva, entre las que se encuentran las de mayor volumen de producción.
El balance más reciente sobre el desarrollo de la vendimia pone de relieve que el ritmo de la actual vendimia difiere significativamente con respecto a la anterior. «Na pasada campaña superábanse os cinco millóns de quilos o 30 de setembro. Nesa data, das 92 que vendimaron no 2020, doce adegas aínda estaban abertas e as oitenta restantes xa finalizaran os traballos», apunta el boletín del consejo regulador. Sobre el papel, este año son cinco más las bodegas inscritas. A las 89 que acabaron la vendimia o están en ella hay que sumar cuatro que la tienen parada y otras tantas pendientes de abrirla.
Coincidencias con el 2012
Ribeira Sacra despidió el pasado mes de septiembre con 3,5 millones de kilos de uva vendimiados, algo menos del 60% del total previsto para esta cosecha. Un porcentaje bajo a esas alturas en comparación con anteriores campañas, en las que el buen tiempo de agosto se había prolongado hasta bien entrado el otoño. No es ni de lejos el caso de la presente añada, marcada por las noches frías de la recta final del verano y por las lluvias que frenaron la maduración de la uva. «A xente ten pouca memoria. O raro foron os últimos anos, nos que se vendimou a pracer», apunta un viticultor.
La vendimia del 2019, en la que se alcanzó la producción récord de 7.262.831 kilos de uva, discurrió entre el 19 de septiembre y la segunda semana de octubre con un tiempo marcadamente anticiclónico. En la campaña del 2018, por su parte, hubo solo un día de lluvia desde las primeras autorizaciones puntuales -que ese año no se produjeron hasta el 11 de septiembre- y el 9 de octubre, cuando ya habían entrado en las bodegas cinco millones de kilos de uva.
Puestos a buscar paralelismos, la presente vendimia tiene mucho en común con la del 2012. Septiembre también fue lluvioso entonces y se cerró solo con 1,5 millones de kilos de uva recogidos. La espera por una maduración óptima parece haber merecido la pena este año en algunos viñedos, que no alcanzaron hasta el pasado fin de semana el grado alcohólico aconsejable. Los técnicos consultados señalan, no obstante, que a partir de ahora la espera entraña serios riesgos en cuanto a la conservación y calidad de la uva.
Una experiencia única de la que apenas se saca partido en la denominación de origen
«No me importaría pagar por estar en una de estas vendimias», comenta un turista a su guía en una visita de grupo a una bodega de la subzona de Ribeiras do Miño. En pocas zonas la recogida de la uva ofrece una imagen con tanta fuerza, pero el aprovechamiento de la vendimia con fines turísticos tiene todavía poco peso en Ribeira Sacra. La mayoría de las bodegas que aceptan visitas en este época del año, de especial ajetreo debido por la recolección de la uva, enfocan los recorridos en sus instalaciones y en el proceso de elaboración del vino. ¿Y porqué no ir a los viñedos en plena recogida? «É algo do que temos falado, pero aínda non nos decidimos a facer nada», responde el bodeguero al que el visitante expresó su deseo de ayudar en la vendimia.
Las jornadas de puertas abiertas en la ruta del vino de la Ribeira Sacra, programadas entre los días 15 y 17 de octubre, ofrecen como es habitual visitas guiadas y degustaciones en las bodegas. Para cuando tengan lugar, la vendimia se habrá dado por concluida en los bancales de vértigo de la Ribeira Sacra.