Tomé defiende la limpieza del contrato de los servicios turísticos en Monforte

Luis Díaz
LUIS DÍAZ MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

Exterior del Centro do Viño da Ribeira Sacra, sede del consejo regulador de la denominación de origen
Exterior del Centro do Viño da Ribeira Sacra, sede del consejo regulador de la denominación de origen ALBERTO LÓPEZ

Acusa a la anterior empresa de tener a los trabajadores en situación irregular

09 jul 2021 . Actualizado a las 15:31 h.

El traspaso de poderes en la gestión de los servicios turísticos en Monforte estuvo salpicado de incidentes por los que el Ayuntamiento valora exigir responsabilidades a la anterior adjudicataria, la UTE Rutas Sacras Nomar. Según el alcalde, José Tomé, la empresa que estuvo al frente del Centro do Viño da Ribeira Sacra desde el 2013 se fue llevándose las llaves, la terminal telefónica y la base de datos de la oficina de turismo. Tomé la acusa de incumplir las condiciones del concurso que obtuvo en el 2013 y dice que trató de «eternizarse pola porta de atrás» al frente de la concesión municipal.

«Imos estudar todo isto e esixir as responsabilidades ás que haxa lugar», señala. De entrada, la reclamación sería de carácter administrativo. Si se produce y la empresa la desoye, el equipo de gobierno no descarta una demanda por la vía judicial. «Se tratan de xogar co Concello, con este goberno co Concello non se xoga», advierte el alcalde. A su juicio, los trabajadores que prestaron sus servicios en estos últimos ocho años en el Centro do Viño «deberían pedir responsabilidades á empresa que os tivo irregularmente contratados» y no al Ayuntamiento.

Acompañado por la concejala de Facenda e Réxime Interior, Gloria Prada, Tomé dio este miércoles una rueda de prensa, para reivindicar la «limpeza e transparencia» del concurso que trajo consigo la gestión de los servicios de turismo por parte de una nueva empresa. El equipo de gobierno se remitió a informes de técnicos municipales y de una consultoría externa para denunciar una serie de irregularidades en las que habría incurrido la UTE Rutas Sacras Nomar. Entre ellas, la contratación de los trabajadores con una categoría laboral y con arreglo a un convenio diferente del que recogían las bases del concurso que se resolvió en mayo del 2013.

Convenio y categorías

Las bases establecían la contratación de auxiliares de turismo con cargo al convenio vigente de agencias de viajes, pero el personal de la anterior empresa habría sido contratado con categoría de recepcionista-telefonista y sobre la base del convenio de ocio educativo y animación sociocultural. Gloria Prada asegura que el Ayuntamiento nunca recibió comunicación por escrito de esta modificación por parte de la UTE Rutas Sacras Nomar, que según destaca tampoco subrogó al personal de la empresa que estaba al frente del Centro do Viño antes de su llegada.

En la práctica, y siempre según el equipo de gobierno, la anterior concesionaria se ahorraba así cerca de 300 euros mensuales en cada una de las nóminas de los cuatro trabajadores que tenía contratados. El Ayuntamiento, sin embargo, pagaba a esta empresa «conforme ao establecido nas bases» a la compensar la diferencia entre ingresos y gastos. «Lamento que a situación a pagasen os traballadores, que non teñen a culpa de nada», apunta el alcalde.

Por otro lado, y de acuerdo con la información municipal, el convenio recogido en las bases del concurso que obtuvo Rutas Sacras Nomar, representada por Xosé Ramón Martínez Mareque, no preveía la subrogación del personal de producirse un cambio al frente de la concesión.

Un informe del técnico municipal de contratación alude a la intencionalidad de esa modificación. «A actitude do adxudicatario, alterando unilateralmente o convenio colectivo de adscrición dos seus traballadores, implicaría un custe engadido para o Concello por canto obrigaría a subrogar a totalidade do persoal, cando nas condicións de licitación se optara por un convenio que non recolle esa obriga de subrogación», detalla.

«Non existe favoritismo dende o momento en que non hai competidores»

El contrato suscrito con la UTE Rutas Sacras Nomar finalizó en mayo del 2013. A partir de ese momento, fue aplicada una prórroga «tácita» mientras se redactaban las bases de un nuevo concurso. No fue fácil, según el equipo de gobierno, por la actitud «obstruccionista» de la anterior concesionaria. Cuando por fin se consiguió, detalla el alcalde, el gerente de esa empresa «intentou en repetidas ocasións, con múltiples chamadas ao servizo de contratación e incluso á tenente de alcalde, alterar as bases do concurso desde que xa estaban publicadas».

Estos intentos perseguían, según la versión municipal, que el concurso quedase desierto. Tomé tilda de «tonterías» las denuncias sobre un hipotético trato de favor a la nueva concesionaria. «O concurso foi aberto, podía ir quen quixera. Ao presentarse unha única oferta, tense que facer a adxudicación. Non existe favoritismo dende o momento en que non hai competidores», señala.

Según el alcalde, el pasado 1 de julio, fecha prevista para el relevo al frente del Centro do Viño, el hasta entonces gerente se negó a entregar las llaves del edificio, motivo por el que el Ayuntamiento procedió a la sustitución de las cerraduras y tuvo que recurrir a la contratación de un servicio de seguridad privada.