Ana Pontón dice que la candidatura encalló por «soberbia» y falta de diálogo
LEMOS
El BNG aboga por consultar a todas las partes implicadas para sacar adelante un plan de usos de la Ribeira Sacra
16 jun 2021 . Actualizado a las 21:18 h.El BNG carga sobre la Xunta toda la responsabilidad del «estrepitoso fracaso» de la candidatura de Ribeira Sacra a patrimonio de la humanidad. Los nacionalistas sostienen que el Gobierno gallego «non fixo o seu traballo e a día de hoxe a Ribeira Sacra segue sen plan de xestión e de usos». También le reprocha, por otro lado, su «soberbia» al elaborar la propuesta «sen diálogo social coa comarca» y pasando por alto «as alegacións presentadas por colectivos e entidades como o Consello Galego da Cultura ou a Rede do Patrimonio Cultural».
«Desde a soberbia non se pode construír nada importante», declaró este miércoles Ana Pontón, tras una reunión con cargos y agentes sociales de la Ribeira Sacra. El encuentro tuvo lugar en el monasterio de Santa María de Ferreira, en el municipio de Pantón. La convocatoria responde al aplazamiento de la presentación de la candidatura a patrimonio de la humanidad, tras el informe negativo del organismo encargado de evaluar su idoneidad.
«Hai que mirar cara adiante e poñer sobre a mesa alternativas de futuro para a Ribeira Sacra, BIC desde 2018 pero sen que esa protección supuxera nada para esa comarca», dijo la portavoz nacional del BNG. Según su criterio, sería necesaria una mesa de trabajo con todas las partes implicadas para desarrollar «un plan de xestión e de usos da Ribeira Sacra».
En el encuentro celebrado en el monasterio de Ferreira participaron la portavoz parlamentaria de Cultura, Mercedes Queixas, las diputadas Carme Aira y Noa Presas , y el alcalde de A Pobra do Brollón, José Luis Maceda.
Por su parte, el PP de Lugo hizo público ayer un comunicado en el que defiende que la candidatura de Ribeira Sacra «está construída sobre o consenso de administracións de distinto signo político e a sociedade civil». Los populares sostienen que posicionamientos como el de la portavoz del BNG implican «unha gran irresponsabilidade» por cuestionar ese trabajo conjunto «por simple interese político e curtoplacista».