Se acabó la etapa de Martín Rodríguez en el CB Chantada. Uno de los mejores bases de la EBA causa baja, y lo hace por motivos laborales. De inmediato comenzará a trabajar en Barcelona, y es por esa razón por la que cambia de aires. Eso sí, a punto de cumplir los 25 años, el vigués deja la puerta abierta a volver en el futuro. El deportista vigués se marcha agradeciendo el excelente trato que recibió por parte de todos los estamentos del club.
-¿Qué balance hace de estas dos campañas en Chantada?
-Han sido muy buenas. El año pasado íbamos directos a la fase de ascenso, pero llegó la pandemia, y esta campaña la disputamos. Me encontré muy cómodo jugando aquí, porque me adapté bien al básquet de Fafián. Se cumplieron con creces las expectativas que traía cuando fiché.
-¿Qué le ha aportado como persona y como jugador haber jugado en este club?
-Venía de jugar poco los últimos dos años y fue llegar aquí y recuperar la confianza como jugador. Fichar por el CB Chantada supuso volver a disfrutar del baloncesto. Y como persona tengo que decir que hice muy buenos amigos. Todos me trataron muy bien. Nunca olvidaré mi paso por este club.
-Sobre usted siempre estuvieron puestas muchas miradas, porque fue el director de juego del equipo, ¿le llegó a pesar la presión?
-Para nada. Yo siempre disfruto mucho jugando al básquet. Es verdad que al principio me costó un poco adaptarme, pero a medida que fue pasando la competición fui creciendo. Para mí asumir la responsabilidad no es presión, al contrario, me motiva.
-Fueron líderes de principio a fin, aunque tuvieron un bajón en la recta final, ¿temió porque el equipo no se clasificara para la fase de ascenso?
-Después de la derrota en Lugo ya pasamos a no depender de nosotros mismos, y ahí sí que se me pasó por la cabeza que pudiéramos quedar fuera. Pero las cosas cambiaron, y cuando tuvimos que jugárnosla, lo hicimos y nos salió bien. Estoy pensando en el partido de Porriño, que fue clave para clasificarnos para la fase de ascenso.
-Y eso que fueron perdiendo.
-Es verdad, pero lejos de venirnos abajo, desesperarnos, ponernos nerviosos y precipitarnos, sacamos nuestro orgullo y ahí se vio el espíritu de equipo. Trabajamos bien en conjunto, lo sacamos adelante, y encaramos la final ante el Obradoiro con mucha motivación.
-¿Cuándo estará Martín Rodríguez en una LEB Plata o en una ACB?
-[Sonríe]. Ahora mismo mi prioridad es el trabajo, y por eso me marcho a Barcelona, ciudad en la que me ha salido una oportunidad laboral. El básquet es un hobby para disfrutar y pasármelo bien.
-¿Su marcha del Chantada es un adiós o un hasta luego?
-Nunca se sabe. Como comenté, aquí estuve muy contento, soy gallego, por lo que no hay que descartar que algún día pueda regresar para vestir de nuevo esta camiseta. Vamos a decir que es un hasta luego.
-¿Qué mensaje le traslada a los aficionados chantadinos?
-De agradecimiento total. Es una afición que se hace notar, porque anima siempre esté el equipo por debajo o con ventaja en el luminoso. Es más, incluso en situaciones adversas nos apoyan como si lo estuviéramos haciendo el juego de los Ángeles Lakers de Magic Johnson. Es una de las mejores aficiones y pistas de España. Toda una ventaja jugar aquí.