El Ribeira Sacra es todo un clásico aportando deportistas no solo a la concentración permanente de Soria, sino también a la selección española. Sin duda, el gran emblema del voleibol monfortino, con quién empezó todo fue Noelia Sánchez. La deportista de Moreda, que se retiró la pasada campaña, fue la primera jugadora del club en incorporarse a la concentración permanente.
A partir de ahí, todo fueron éxitos para la eterna capitana del Ribeira Sacra -antes AD Pinguela-. Sánchez, que reunía talento y experiencia, a pesar de su juventud, marcó una época en el volei local y en el español. Ahí están sus innumerables internacionalidades.
Después de Noelia pasaron por la concentración permanente Jennifer Mendoza, Sara Díaz, María Sanjurjo, Antía Díaz, Carolina Camino y María José Garrido. En un partido de la selección española se dio una circunstancia curiosa, y es que tres de las seis jugadoras que estaban en pista eran de Monforte. Fueron Noelia, Jennifer y María José Garrido.
Martínez, el artífice
Si hay un técnico que apostó decididamente por la cantera ese fue Manolo Martínez. De hecho, fueron las jugadoras monfortinas, que reforzadas con deportistas que marcaron la diferencia, dieron el salto a la élite del voleibol español.
Fueron muchos los años que invirtió Manolo Martínez en el trabajo con las jóvenes promesas. Todas las que se incorporaron a la concentración permanente lo hicieron de la mano del preparador monfortino.