Los incentivos para el sector vitícola que impulsó la Diputación en el 2005 podrían reeditarse en los próximos presupuestosGalicia solo recibirá 83.359 euros para ayudar al sector del vino con el covid-19

Maruxa Alfonso Laya
m. alfonso REDACCIÓN / LA VOZ

LEMOS

07 oct 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

La junta de gobierno de la Diputación de Lugo, con Gómez Besteiro al frente, aprobó a comienzos del 2015 un plan de impulso del rural y del sector primario al que se destinaban 2,2 millones de euros. El programa de ayudas, que estaría vigente solo ese año, incluía siete líneas de financiación correspondientes a otras tantas áreas productivas. Una de ellas estaba centrada en el viñedo y contemplaba la concesión de subvenciones para trabajos de mantenimiento y protección frente a los animales silvestres.

Aquel plan permitió a los viticultores de Ribeira Sacra acceder a ayudas para la reconstrucción de bancales y la instalación de cierres perimetrales fijos. La condición, en este último caso, era que las parcelas tuviesen una superficie mínima de 300 metros cuadrados. Las subvenciones tenían un importe máximo de 6.000 euros y no era necesario que el propietario de la parcela fuese agricultor a título profesional. Tan solo era preciso que figurase inscrita en el registro vitícola.

Preguntado por la posibilidad de dar continuidad a ese plan, al ahora presidente de la Diputación de Lugo, José Tomé, señaló que los presupuestos del 2021, en los que se está trabajando, incluirán «liñas novidosas de axuda» con las que se pretende dar «un importante apoio ao sector primario». Tomé declinó dar más detalles hasta que la iniciativa quede perfilada y esté en condiciones de darse a conocer.

Tal y como se preveía, las ayudas establecidas por el Ministerio de Agricultura para ayudar al sector del vino a superar la crisis del coronavirus han sido insuficientes. Los 91 millones de euros habilitados para financiar la destilación en crisis, el almacenamiento privado y la cosecha en verde no han llegado para atender a todas las peticiones recibidas. Así que, según explica el Fondo Español de Garantía Agraria en un informe, ha sido preciso efectuar un recorte para repartir el dinero entre todas las solicitudes. Galicia solo había presentado 17 peticiones, por un valor total de 236.467 euros. Pero es que, al final, la comunidad solo recibirá 83.359 euros de estas subvenciones, lo que supone un 0,09 de la cuantía total que se va a repartir entre el sector vitícola español.

El ministerio decidió hace unos meses habilitar una partida de 91 millones de euros para ayudar al sector del vino a superar la crisis del coronavirus, pues el cierre de la hostelería provocó un parón en las ventas que, se temía, podía tener repercusiones en la vendimia de este año. De esos 91 millones, 65 se destinaban a la destilación en crisis, una medida que ninguna bodega gallega solicitó. Sí quisieron en cambio estas empresas acogerse a los otros dos tipos de ayudas: el almacenamiento privado y la poda en verde. En el primero de los casos, Galicia tramitó un total de diez peticiones: cuatro correspondientes de la denominación de origen Rías Baixas, dos de la Ribeira Sacra y de O Ribeiro y una en Valdeorras y en Monterrei. Pedían estas bodegas 155.790 euros para almacenar 27.030 hectolitros de vino.

Pero, según el informe elaborado por el Fega, la partida habilitada para estas ayudas, de más de 16 millones de euros, no era suficiente para atender la demanda que había en toda España. Eso ha obligado a imponer un coeficiente reductor en las subvenciones otorgadas del 44,31 %. De esta forma, de los 155.790 euros que había solicitado Galicia inicialmente solo percibirá 67.382 euros, lo que le permitirá almacenar un total de 11.976 hectolitros. Esto significa que las bodegas de esta comunidad apenas percibirán un 0,4 % de la ayuda total habilitada para este fin.

En cuanto a la cosecha en verde, se habilitó una partida de diez millones de euros para todo el país, de la que Galicia percibirá exactamente 15.967 euros, de los 37.155 euros solicitados.