La alarma por la presencia de mildiu en las viñas se extiende a la Ribeira Sacra

LEMOS

Mancha de mildiu en las hojas en una viña de la ribera del Sil
Mancha de mildiu en las hojas en una viña de la ribera del Sil CEDIDA

Las escasas treguas que da la lluvia se aprovechan en las zonas de viñedo para aplicar tratamientos que frenen su propagación

02 may 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Los elementos parecen haberse conjurado este año contra la cosecha de uva. Primero fueron las heladas que afectaron a los viñedos a finales de marzo, cuando los brotes comenzaban a despuntar en las cepas. Con los incipientes racimos ya a la vista, hizo su aparición el black-rot. Este hongo, uno de los que atacan a las vides, se propagó en las últimas semanas espacialmente en la ribera del Miño. Faltaba el temido mildiu, pero no se hizo esperar. Desde hace días, da pie a alertas por parte de las estaciones de avisos en otras zonas de Galicia. Ahora llega también a la Ribeira Sacra.

«Xa empeza a festa», señala resignado un viticultor de Doade en su Facebook junto a una imagen en la que se aprecia una mancha aceitosa en la hoja de una vid. Es el aviso de que la planta está contaminada por ese hongo. Y conviene tomarlo muy en serio, porque si termina por extenderse a los minúsculos racimos ya no desarrollarán más. Los daños por este motivo en el 2016 fueron muy importantes. Aunque en menor medida, tuvieron continuidad en la vendimia del 2018.

En las escasas treguas que concedan las lluvias, los viticultores aprovechan para dar tratamientos en las viñas para cortar la propagación del mildiu. El jueves las riberas eran un ir y venir de tractores y todoterrenos con mochilas, carretillas y mangueras para aplicar productos fitosanitarios. La humedad es el caldo de cultivo ideal para este hongo, que se propaga con rapidez con las temperaturas de estos días. Las previsiones meteorológicas obligan a no bajar la guardia.