Después de la jornada de descanso, el piloto monfortino Edu Iglesias reanuda a primera hora de la mañana el Dakar. El deportista local, que ocupa actualmente el puesto 105 en la clasificación general, entra en la segunda entrega de la prueba de motor más importante del mundo.
Iglesias sigue ilusionado, ya que a pesar de las dificultades que tuvo que sortear, sobre todo en la tercera y cuarta etapa, se ha adaptado bien a este Dakar. El hecho de haber competido en varias ocasiones en el desierto con anterioridad está siendo clave para que el monfortino mantenga el tipo.
La de hoy será la séptima etapa, que discurrirá entre las ciudades árabes de Ryad y Wadi Al Dawasir. Es la más larga del Dakar y también una de las más variadas. Dunas desperdigadas por todo el recorrido que deberán abordar los pilotos atravesando a su vez pequeñas franjas de dunas de varios kilómetros. Entre medias, se alternan el fuera pista y sectores en los que los numerosos cruces exigirán a los copilotos máxima concentración.
En total son 195 kilómetros de enlace y 546 de etapa. Iglesias tiene buenas sensaciones, sobre todo después del descanso, pero admite que llega lo más duro.