El incendio deja a la vista un gran basurero cerca del pazo de Tor

Luis Díaz
LUIS DÍAZ MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

ROI FERNÁNDEZ

La maleza disimuló durante años una escombrera que en teoría estaba sellada

28 sep 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

El incendio que arrasó a comienzos de septiembre setecientas hectáreas en las proximidades del casco urbano de Monforte dejó a la vista un vertedero de grandes dimensiones que hasta ahora ocultaba la maleza en la parroquia de Seoane. Los residuos se acumulan entre la antigua carretera de Escairón y los accesos al pazo de Tor, cerca de una lechería ahora inactiva. «Hai moreas de terra e cristais sen nivelar, ademais de numerosos obxectos metálicos», denuncia Emilio Sánchez, concejal del BNG.

A finales del 2006 trascendía que se había procedido al sellado de ese vertedero mediante escombros procedentes de las obras de ensanche del vial entre Seoane y Tor. El incendio que afectó recientemente a ambas parroquias -junto a otras cinco situadas en los municipios de Monforte y Pantón- pone de relieve que en realidad solo se tapó con tierra una pequeña parte de los residuos.

El BNG llevará este lunes a pleno una petición para que se proceda al correcto sellado del vertedero. Emilio Sánchez solicita además que se esclarezca la propiedad de la parcela y que se haga un estudio «sobre o seu posible aproveitamento». «Non cremos que esa sexa a imaxe que se pretende transmitir», apunta Sánchez en referencia al aspecto actual de la escombrera.

Los vertidos se amontonan en un terreno de cerca de cinco hectáreas conocido por los nombres de Lama de Seoane y Rego do Sapo, en referencia a un arroyo próximo por el que el agua solo discurre habitualmente en los meses de invierno. «O lixo que se acumula alí é unha barbaridade, pode ter tranquilamente dous metros de altura» dice el concejal nacionalista.

El supuesto sellado del vertedero incontrolado de Seoane se produjo en octubre del 2006, pero no llegó a quedar clara la responsabilidad de este medida. El Ayuntamiento era conocedor de la presencia de grandes cantidades de escombros en ese lugar, al parecer depositados por algunos constructores. La concejalía de Medio Ambiente negó entonces, sin embargo, que la orden de taparlos fuese municipal.

La tierra con la que se cubrieron los residuos parcialmente procedía de las obras de ensanche realizadas por la Diputación en la carretera entre Seoane y Tor, con la que también linda la enorme escombrera.

Un vertido realizado por un constructor en el 2006 hizo que se tomasen medidas

De las pesquisas realizadas por el concejal del BNG se desprende que los terrenos donde se amontona la basura no son propiedad de la parroquia de Seoane. Emilio Sánchez espera, en todo caso, que el alcalde pueda aclarar en el próximo pleno la titularidad de la parcela y las medidas que piensa adoptar el Ayuntamiento. «O lixo que hai alí é unha verdadeira barbaridade», señala.

El actual regidor, José Tomé, era concejal de Medio Ambiente cuando surgieron las denuncias por la escombrera. Su partido, el PSOE, estaba coaligado entonces en el gobierno municipal con el BNG, que no disponía de mayoría absoluta. Consultado al respecto, Tomé prefirió no hacer declaraciones sobre esta cuestión hasta el pleno.

El basurero de la parroquia de Seoane fue utilizado sistemáticamente como punto de vertido hasta que el partido Independientes de Lemos denunció públicamente en el 2006 que un constructor había echado allí una tonelada de escombros.