«No divulgamos simples huesos, sino que ponemos en valor lo que hay detrás»

christian rodríguez / c.c. MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

CEDIDA

El Ayuntamiento de A Pobra utiliza su patrimonio arqueológico para atraer visitantes en verano

29 jul 2019 . Actualizado a las 20:21 h.

El Ayuntamiento de A Pobra de Brollón ha reeditado sus recorridos arqueológicos para la campaña estival. Esta curiosa iniciativa turística tiene su origen en la restauración del castro de San Lourenzo de Cereixa y continúa a rebufo de la aparición el pasado mayo de los que podrían ser los huesos más antiguos encontrados en Galicia. El técnico de cultura y turismo en el municipio, Xosé Gago, lo explica más en profundidad.

-¿Cuántos años llevan haciéndose estos tours arqueológicos?

-En 2017 comenzaron las visitas guiadas al castro de San Lourenzo que acompañaban a las excavaciones de aquel momento. El año pasado ampliamos la oferta a las bodegas de Vilachá y la Cova das Choias y la campaña de este verano va enfocada en la misma línea.

-¿Qué acciones han impulsado esta estrategia turística?

-Tenemos que valorar todo el trabajo que han hecho los vecinos. Tanto su participación en los documentales de Adegas da Memoria como su empeño en recuperar la romería al castro de Cereixa han sido determinantes.

-De hecho, el castro es el eje de los campos de trabajo juveniles que organiza la Xunta

-Así es. Aparte de colaborar en la restauración, queremos integrar a los participantes en este curso en nuestra comunidad. Con la romería se retomó la idea de aunar a todo el pueblo alrededor del yacimiento. Nuestros visitantes disfrutarán este año de los conciertos, la lluvia de estrellas y las demás actividades programadas en torno a la fiesta de San Lourenzo.

-¿Concuerda esta estrategia con los planes de turismo activo que están tan de moda en la zona?

-Yo lo llamaría más bien turismo cultural. Gracias a los vecinos, y en concreto a la asociación de Amigos de María Castaña, hemos recuperado la memoria de las parroquias y de aquellos lugares que acogen los complejos arqueológicos que promocionamos. Con sus aportaciones hemos creado narrativas para explicar la historia del municipio.

-¿Cuál diría que es el mayor atractivo de A Pobra?

-El castro de San Lourenzo de Cereixa se ha convertido en nuestro buque insignia. Después destaca Vilachá por ser la única parroquia que se enmarca en los límites del paisaje de interés cultural de la Ribeira Sacra, donde se mueve el enoturismo. Aunque nuestro mayor atractivo recae en la participación de los vecinos en la recuperación de nuestro patrimonio.

-¿Y qué me dice de las excavaciones de Os Conventos?

-Otra que se comenzó por indicación de los vecinos. Todo apunta a que este lugar albergó el antiguo monasterio de San Martiño de Piñeira. A esperas de que los expertos lo confirmen, durante las prospecciones descubrimos además un enterramiento en una roca hueca de un cráneo y unos fémures que podría datar de la Edad de Bronce. De ser así, estarían entre los restos arqueológicos más antiguos encontrados en Galicia.

-¿Qué cifras de visitantes manejan?

-Durante los dos meses de campaña del verano pasados nos visitaron 1.500 turistas.

-¿Es difícil divulgar los avances arqueológicos ante los turistas?

-Seguimos estrategias de interpretación del patrimonio para que no lo sea. Creamos narrativas universales que todo el mundo pueda entender. Nos servimos del humor y de la empatía para hacerlo ameno. Hay que tener en cuenta que las personas que vienen están de vacaciones y no quieren escuchar rollos.

-¿Cuál es el objetivo de esta campaña turística?

-Por un lado, definir nuestra identidad como un municipio rural que ha sabido poner en valor su patrimonio para crear un modelo turístico con personalidad propia. Por otro lado, y en consecuencia, dinamizar la economía local alrededor de estas visitas, que organiza el ayuntamiento de manera gratuita.

-¿Qué otros sitios formarían parte de ese eje arqueológico?

-La Casa de Repil, donde hubo un enfrentamiento entre la Guardia Civil y los guerrilleros. Nos hemos percatado de que existe un especial interés en la memoria histórica. Últimamente se han abierto también fosas comunes en las parroquias de Castroncelos y Saa, pues es una forma de dignificar a las víctimas de la Guerra Civil a la vez que divulgamos su historia desde una perspectiva turística.