Rescatan la obra del padre Esteban Martínez sobre el Colegio del Cardenal

Francisco Albo
francisco albo MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

Una feria en la explanada de la Compañía a principios de los años 70. La imagen fue publicada en la primera edición del libro de Esteban Martínez, que no se ha vuelto a imprimir desde hace diecinueve años
Una feria en la explanada de la Compañía a principios de los años 70. La imagen fue publicada en la primera edición del libro de Esteban Martínez, que no se ha vuelto a imprimir desde hace diecinueve años CEDIDA

El libro, impreso por primera vez en el año 2000, no se volvió a editar y hoy es casi imposible encontrarlo

17 abr 2019 . Actualizado a las 19:24 h.

El colegio de los Escolapios de Monforte reeditará este año el libro Colegio de Nuestra Señora de la Antigua, escrito por el padre Esteban Martínez -antiguo profesor de este centro- y publicado por primera y única vez en el año 2000. La obra, prácticamente imposible de encontrar en la actualidad, es la principal publicación divulgativa sobre la historia del Colegio del Cardenal. Los responsables del colegio esperan que la reedición aparezca a principios del verano y que pueda estar disponible cuando se celebre -el 4 de agosto- el cuarto centenario de la consagración de la iglesia que forma parte del edificio histórico.

El director del colegio, Pablo Blanco, señala que la nueva edición no se limitará a reproducir la obra original. «El texto del padre Esteban se mantendrá tal como él lo redactó, pero la obra se enriquecerá con una serie de fotografías históricas que conseguimos recuperar y con aportaciones de varios colaboradores», explica. Entre otros aspectos -añade-, el libro incluirá una biografía actualizada del autor, que falleció dos años después de que se imprimiese la primera edición.

Datos actualizados

La nueva edición también incluirá apartados en los que se expondrán algunas actuaciones realizadas desde entonces en el edificio, como la limpieza del retablo mayor de la iglesia -obra del escultor barroco Francisco Moure- que se llevó a cabo el año pasado. Asimismo, se ampliará una lista de los rectores del colegio que aparecía en la obra original, añadiendo los que ejercieron este cargo desde principios de este siglo.

Pablo Blanco indica por otro lado que la nueva edición del libro se preparará con más cuidado que la primera, que se imprimió sin ISBN aunque fue publicada con el apoyo del Ayuntamiento de Monforte y la Xunta. «Nuestra intención es vendérselo a los visitantes del colegio y quizá también distribuirlo en alguna librería», explica el director del centro. Los beneficios que se obtengan se destinarán a financiar los trabajos de mantenimiento del edificio monumental, que -según indica Blanco- suponen un gasto considerable. «La limpieza del retablo, por ejemplo, costó un auténtico dineral», dice.

El libro de Esteban Martínez se editó originalmente como un volumen de 134 páginas y fue impreso en una tirada de 3.000 ejemplares. La obra recogía algunos textos publicados anteriormente por el autor en una revista histórica denominada Analecta Calasanctiana y en un folleto divulgativo sobre la historia del colegio. Por ahora no se ha decidido cuántos ejemplares se imprimirán en la nueva edición.

Un burgalés estrechamente unido a Monforte desde 1934

Nacido en 1911 en la localidad burgalesa de Cubillos del Rojo Esteban Martínez González se incorporó en 1934 al colegio monfortino y a partir de entonces residió en la ciudad durante la mayor parte de su vida, excepto un corto período pasado en Alcalá de Henares en 1975. Trabajó como docente en el centro hasta su jubilación, en 1983, y se distinguió por sus extensos conocimientos sobre la historia del edificio, donde sirvió muchas veces como guía a los visitantes.

El Ayuntamiento de Monforte distinguió su prolongada relación con el municipio -donde gozaba del aprecio general- nombrándolo hijo adoptivo en 1985. Los últimos años de su vida los pasó en una residencia de la orden casalancia en Madrid, donde falleció en el 2002. En cumplimiento de su voluntad, sus restos mortales fueron trasladados a Monforte en el 2016 para recibir su sepultura definitiva.