Los cascotes siguen sin ser retirados un mes después del último desplome

Luis Díaz
luis díaz MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

CEDIDA

Herederos de las casas en ruina rechazan la notificación que les insta a demolerlas

05 dic 2018 . Actualizado a las 21:22 h.

El próximo martes se cumplirá un mes del desplome de dos casas deshabitadas en la Falagueira. A raíz de la rehabilitación de algunas de sus edificaciones más singulares, esa calle se ha convertido en uno de los atractivos del conjunto monumental de San Vicente. Pero los escombros siguen ahí, a escasa distancia del Parador de Turismo. Y posiblemente continúen sin retirarse durante un tiempo prudencial. Según informa el Ayuntamiento, algunos herederos están ilocalizables y otros rechazaron la carta en la que se les notifica el expediente de ruina.

Fuentes municipales indicaron tras el derrumbe que el número de propietarios podría rondar la treintena. Son los destinatarios de una comunicación que pone en su conocimiento la declaración de ruina de estas edificaciones, en ambos de casos de bajo y una planta. También les informa de su obligación de proceder a la limpieza de los cascotes y al derribo de los elementos constructivos que todavía se mantienen en pie.

Hay que agotar los plazos

El Ayuntamiento asume que es muy probable que tenga que asumir las tareas de desescombro y demolición, cuyos costes le serían requeridos posteriormente a los propietarios de las viviendas que se vinieron abajo. Pero para poder actuar de forma subsidiaria tendrá que agotar los plazos que establece la ley para que respondan los titulares de los inmuebles. «Do contrario poderían ser eles os que nos demandasen a nós», explica el alcalde, José Tomé.

La declaración de ruina fue aprobada por la junta de gobierno poco después del desplome y Tomé informó posteriormente del acuerdo en la comisión provincial de Patrimonio. Pese a ello, la foto del lugar en el que se produjo el desplome -que causó daños a un coche estacionado en las proximidades- ha variado poco transcurridos veinticinco días. La única salvedad es que el escombro ya no ocupa la calzada. Personal municipal hizo acopio de piedras, ladrillos, bloques de pared y listones de madera al pie de los retos de las casas.

El PP pide a Tomé que convoque a los portavoces para aclarar qué pasa con el plan de protección

Solo constructores y técnicos, autores de una alegación conjunta, fueron informados hasta ahora de los cambios que se van a aplicar en la propuesta del plan especial de protección. La portavoz del PP, Julia Rodríguez, considera una «falta de respeto» que no se haya hecho lo mismo con los grupos municipales, que a fin de cuentas representan «a muchos de los vecinos afectados». Esta formación pide a Tomé que convoque a la junta de portavoces para aclarar en qué situación se encuentra el futuro planeamiento del conjunto histórico.

Julia Rodríguez cree que el equipo de gobierno y el equipo redactor deben dar cuenta a los representantes de los vecinos «de las modificaciones que se realizaron atendiendo a consideraciones de los constructores y técnicos, y a las alegaciones de particulares y grupos municipales». La concejala del PP sostiene que el alcalde pone de manifiesto una vez más «su incapacidad para consensuar nada».