El casco urbano chantadino se queda sin su último hórreo

f. a. CHANTADA / LA VOZ

LEMOS

ROI FERNÁNDEZ

En un pleno celebrado el pasado lunes, Por Chantada pidió medidas de protección para esta construcción tradicional

17 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

En un pleno celebrado por la corporación chantadina el pasado lunes, el portavoz de Por Chantada, Antón Fente, presentó una pregunta sobre la conservación de un hórreo y una palleira situados en la confluencia de las calles Carlos Gilberto Otero y Xoán XXIII. El edil resaltó el valor patrimonial de estas edificaciones -la últimas de este tipo en el área urbana- y señaló que en el hórreo estaba clavado un letrero que anunciaba la construcción de un edificio de viviendas en esa parcela. El gobierno municipal, según explicó Fente, dijo que no le constaba que se hubiese presentado una solicitud de licencia para esa obra.

Pero el hórreo por el que se interesó Por Chantada a principios de la semana ya no estaba ayer en pie. La construcción fue desmontada y el terreno sobre el que se hallaba fue rebajado hasta el nivel de la calle, de la que estaba separada por un vallado de piedra que también ha desaparecido. El letrero que antes estaba clavado en las tablas del hórreo está ahora colgado de una valla metálica que cierra la parcela.

Antes de que esto se supiese, Antón Fente manifestó su intención de tomar iniciativas para impedir la demolición del hórreo y la palleira. «O goberno local xa deixou claro que non contempla facer nada mentres non comezasen as obras, pero nós entendemos que hai que facer algo para salvar estes elementos patrimoniais», apuntó el edil a este respecto. «Pódense recoller sinaturas entre os os veciños ou recorrer á Valedora do Pobo», añadió.

Medidas de protección

Los integrantes de Por Chantada, por otro lado, consideran que estas dos construcciones deberían haber sido incluidas en el plan especial de protección del casco histórico y en el plan general de ordenación municipal -ambos en fase de tramitación-, a fin de dotarlas de una protección legal que garantizase su conservación. «Pero non se mencionaron nin nun plan nin no outro, a pesar de que eses elementos se encontran en pleno casco urbano e nun lugar perfectamente visible, de maneira que non podían pasar desapercibidas para os técnicos que se encargaron de redactalos», apuntó Fente.

El portavoz de Por Chantada indicó por otro lado que su formación presentó en su momento varias alegaciones al PXOM en las que se solicitaban medidas de protección y conservación para diversas construcciones tradicionales situadas en el territorio municipal, como hórreos y molinos. «Pero esas alegacións non se tiveron en conta e a única construción tradicional que foi recoñecida no plan de ordenación é o muíño da Alameda», comentó.

Asimismo, Fente abogó por recurrir a la «presión popular» para «frear as agresións ao patrimonio, como sucedeu co aparcadoiro que se proxectaba construir no casco histórico». En el caso del último hórreo del casco urbano, las iniciativas que se pudiesen tomar para su conservación ya no tendrán efecto.