La médica Begoña Santos habló en Monforte de las nuevas técnicas oncológicas
26 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Un centenar de personas asistieron ayer a la conferencia de la doctora Begoña Campos, oncóloga del EOXI Lugo-Lemos-Burela, que se ofreció en la Casa de Cultura de Monforte dentro del ciclo Charlas Saludables. La ponencia, bajo el título «El tratamiento a la carta en oncología», se centró en los avances experimentados por la medicina oncológica en los últimos años, que -según indicó la especialista-, «están cambiando a una velocidad vertiginosa».
Campos inició su conferencia señalando que si bien los casos de cáncer «son cada vez más frecuentes en el contexto español, también se están reduciendo los índices de mortalidad por estas dolencias», algo que está sucediendo de forma progresiva desde principios de siglo. Esta mejora -precisó- se debe a una tendencia general hacia estilos de vida más saludables y a los avances en las técnicas de diagnóstico precoz y a la aparición de nuevos tratamientos y fármacos.
Biopsias líquidas
Por lo que respecta a la detección de tumores, Campos hizo hincapié en la importancia de las llamadas biopsias líquidas, un sistema que permite localizar la presencia de células tumorales en la sangre, la orina y la saliva. «Esta técnica todavía no sirve para realizar diagnósticos precoces -explicó-, pero ofrece la gran ventaja de que es muy accesible y permite hacer en cualquier momento un seguimiento de la evolución de los tumores y del efecto que tienen los tratamientos en los pacientes, lo que ayuda a corregirlos y mejorarlos para que sean más eficaces».
En cuanto a los tratamientos, Begoña Campos afirmó que la situación actual supone un gran cambio con respecto a la que se daba hasta hace algunos años, cuando las quimioterapias eran inevitables. Según apuntó la especialista, ahora los médicos y los pacientes tienen a su disposición nuevas técnicas como los denominados fármacos multidianas, los antiangiogénicos y las inmunoterapias. Los primeros permiten combatir de forma específica las mutaciones que experimentan las célulosas cancerosas y los segundos tienen el objetivo de frenar la formación de los vasos mediante los que los tumores se alimentan, frenando su crecimiento y dejándolos estancados. Por otro lado, la inmunoterapia consiste en activar las células del sistema inmune del organismo para que ataque por sí mismo las células cancerosas. «El problema es que este sistema no funciona con todos los pacientes y a priori aún no podemos saber con cuáles puede servir y con cuáles no», agregó.
Por otro lado, Campos resaltó el valor de los ensayos clínicos de nuevos medicamentos con los pacientes oncológicos, que también se llevan a cabo en los hospitales lucenses. «Estos ensayos causan recelo en algunos pacientes, porque piensan que los están utilizando como cobayas, pero hay que tener en cuenta que cuando llegan a ellos estos fármacos ya han pasado por muchas pruebas y que no debe haber ese temor», indicó.
Uno de los principales cambios en el tratamiento de las enfermedades oncológicas, apuntó asimismo Campos, «es que ahora está todo mucho más personalizado y que los especialistas no tratan un cáncer cualquiera, de una forma genérica, sino el cáncer de un paciente muy concreto, porque estas enfermedades son muy diferentes en cada persona y requieren un abordaje muy personalizado».
El ciclo Charlas Saludables está organizado La Voz en colaboración con la Consellería de Sanidad y con el patrocinio de los laboratorios farmacéuticos Janssen y Amgee.
Pacientes tentados por las terapias pseudocientíficas en los hospitales de la provincia
Al término de la conferencia, los asistentes tuvieron ocasión de dirigir por escrito a Begoña Campos las preguntas que consideraron convenientes. Estas son las algunas de las cuestiones que se formularon desde el público.
Pseudoterapias e Internet. Un asistente quiso saber si los oncólogos de los hospitales lucenses se encuentran con muchos casos de abandono de los tratamientos por parte de pacientes que deciden aplicarse pseudoterapias o «remedios» sin fundamento científico encontrados en Internet. Begoña Campos explicó que estas situaciones son muy frecuentes y que se han registrado algunas de ellas en las áreas sanitarias de Monforte y Lugo. «Tuvimos casos muy tristes de pacientes que dejaron el tratamiento y volvieron a nosotros a los seis meses pero ya sin tener opciones de mejora», dijo. «Hay que hablar siempre con los especialistas y no ir a la desesperada a probar con veneno de escorpión o cualquier otra cosa que no tiene ninguna base médica o científica», añadió.
Incidencia local. Otra pregunta planteada desde el público trató sobre si la incidencia de ciertos tumores como el de mama -particularmente en lugares como Monforte y Chantada- puede deberse a causas ambientales. La especialista señaló que en la provincia se dan en general numerosos casos de cánceres digestivos, lo que puede deberse al consumo de determinados alimentos, pero que en otros como los de mama no se conocen indicios que permitan hablar de causas ambientales. «Si en una zona geográfica concreta se dan muchos casos de cáncer de mama, lo más probable es que haya una predisposición genética compartida entre distintas familias que viven en ese territorio y que están relacionadas por los lazos de parentesco y la endogamia», apuntó.
Pruebas de detección. Entre los asistentes hubo uno que quiso saber si hay alguna edad especialmente recomendable para hacerse pruebas de detección de tumores. Begoña Campos señaló que las más aconsejables son las que están incluidas en las campañas de prevención de la Consellería de Sanidad -normalmente a partir de los 50 años-, pero que también puede ser conveniente realizar pruebas a otras edades en familias en las que haya casos reiterados de enfermedades oncológicas, que pueden deberse a alteraciones genéticas.