Una empresa monfortina pierde un litigio con el Gobierno por la prima eléctrica

Carlos Cortés
carlos cortés MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

ALBERTO LÓPEZ

Iba a invertir cinco millones en una planta de cogeneración de energía

15 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Habían proyectado una planta de cogeneración de energía que prestaría servicio para una empresa láctea radicada en Monforte y exportaría su electricidad a la red general. Pero la derogación en el 2013 del decreto que primaba las energías renovables echó por tierra sus planes. Los responsables de Acapital Cogeneración y Monforte de Energía reclamaban judicialmente al Gobierno central una indemnización de 639.000 euros por los daños y perjuicios ocasionados por el cambio legal. Acaban de perder su caso en el Tribunal Supremo.

Las dos empresas, la primera un grupo inversor internacional y la segunda una firma creada exclusivamente para este proyecto, presentaron en los tribunales argumentos similares a los de muchas otras empresas que también decidieron presentar recursos legales cuando vieron que el nuevo sistema de tarifas convertía sus proyectos en inviables.

Los representantes legales de los demandantes defendían que este cambio legislativo provocaba inseguridad jurídica y el principio legal de confianza legítima, «ya que se llevaron a cabo unas inversiones en la creencia de que el régimen retributivo se mantendría durante la vida útil de la instalación».

El proyecto que estas dos empresas querían poner en marcha en Monforte necesitaba de una inversión de cinco millones de euros.

Una planta de siete megavatios que iba a calentar agua y producir electricidad

Las dos empresas que presentaron este recurso judicial contra la modificación de las primas por producción de electricidad fueron constituidas para poner en marcha un proyecto de cogeneración de energía para Euroserum Ibérica, la planta láctea de capital francés que opera desde hace años en el polígono industrial de O Reboredo, en Monforte.

Su plan pasaba por poner en marcha dentro de la parcela de la empresa una planta de cogeneración que les permitiría vender a Euroserum Ibérica energía para generar vapor y agua caliente y colocar en el mercado la electricidad que fuese capaz de producir. La planta de cogeneración que los promotores tenían previsto instalar era de siete megavatios.

Con esa potencia, el precio de venta de la electricidad generada por estas instalaciones no podría beneficiarse de casi ninguna de las bonificaciones que fueron instauradas en el 2007 y derogadas en el 2013 por el Gobierno central. En todo caso, los promotores de este proyecto sí que contaban con aprovechar la garantía de exportación de la red de toda la energía producida, bajo las condiciones del régimen especial de productores de energía eléctrica que establecía el real decreto del 2007 que el Gobierno derogó seis años después. Los cambios legislativos del 2013, alegaban en su demanda, convirtieron en inútil toda la inversión realizada en este proyecto.