Pedro Fernández Losada, que tiene su raíces en la ciudad del Cabe, suma dos bronces en los campeonatos de España, y competirá en el Europeo
10 ago 2018 . Actualizado a las 13:29 h.La Ribeira Sacra intensifica su relación con el patinaje. Si en hockey sobre patines las raíces de los entrenadores del Liceo y del FC Barcelona, Juan Copa y Edu Castro, respectivamente, están en O Incio, las de Pedro Fernández Losada están en Monforte.
La joven promesa, de 14 años, es una de las joyas del patinaje artístico español. Ya cuenta en su palmarés con dos medallas de bronce nacionales, y en pocas semanas competirá en las islas Azores en el campeonato de Europa con la selección española. Fernández es un asiduo en Monforte, donde pasa las vacaciones y largas temporadas con sus abuelos, Gil Losada y Herminda López. La familia tiene su residencia en Santander.
Su madre, la monfortina Susana Losada, fue clave para que el joven deportista se inclinara por el patinaje artístico. «A Pedro desde pequeñín ya le gustaba bailar, y en una ocasión [tenía 7 años] lo llevé a ver un espectáculo de patinaje artístico. Le encantó y me dijo si podía practicar este deporte. Le dije que sí», señala Losada.
Con 8 años se puso a las órdenes de Alexia Rojo, la única patinadora española que posee los títulos de campeona de España, de Europa y del Mundo en las dos modalidades, individual y pareja, y que actualmente es la directora de la escuela Alexmar de patinaje, en Santander.
El primer año Pedro solo acudía a entrenar dos veces por semana, pero su entrenadora vio que tenía un potencial enorme, y le transmitió a su madre que ejercitándose más podía llegar muy alto. El joven patinador se puso manos a la obra. «Comencé a entrenar tres horas cinco días a la semana, lo que permitió mejorar y conseguir medallas», dice Pedro Fernández.
Su primera participación en un campeonato de España fue en el 2014. Compitió por parejas, y se alzó con la cuarta plaza. No obstante, al joven patinador esta modalidad no le satisfizo, y optó por la individual. Acertó, porque en el año 2015 acabó quinto en el nacional.
Una inoportuna lesión de rodilla lo mantuvo alejado de las pistas en el 2016, pero regresó con fuerza en el 2017. Precisamente, ese fue el año en el que conquistó su primera medalla. Se situó en el podio para recibir el bronce. Fue en su segundo año de infantil.
Empezó el actual con ilusión, y estrenando la categoría cadete obtuvo de nuevo la medalla de bronce, lo que lo clasificó directamente para el campeonato de Europa que se disputará en las islas Azores entre los días 31 y 9 de septiembre, donde acudirá con la selección española. «Estoy muy contento, porque como deportista ir con tu selección es el no va más. Esto me motiva mucho y me anima a seguir trabajando para continuar creciendo como patinador», añade.
La joven promesa recuerda como fueron sus inicios. «Cuando me llevó mi madre a ver un espectáculo de patinaje me llamó mucho la atención y me encantó. Desde ese momento fue mi pasión», indica.
Un deporte complejo
Pedro Fernández disfruta patinando, pero admite que es un deporte complicado. «Sí es bastante difícil y peculiar, porque cuando sales a la pista te lo juegas todo. Te permite sacar la pierna y los abdominales», señala.
Este verano ya pasó varias semanas con sus abuelos en Monforte, ciudad en la que disfruta. De hecho, se considera un monfortino más. «Me lo paso muy bien. La pena es que no haya una pista para entrenar», puntualiza. No es la primera vez que se desplaza hasta Oleiros para ejercitarse. En la localidad coruñesa hay un club de patinaje.
Su objetivo a corto y medio plazo está en hacerlo bien en el Europeo que se disputa en Portugal. «Muchas aspiraciones no tengo, porque aún estoy en primer año de cadete. Pero el objetivo es divertirme y coger experiencia de cara a próximas ediciones», concluye la joven promesa del Alexmar.