Los médicos del área de Monforte atendieron 44.490 citas de este tipo en el 2017
09 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Doce de cada cien usuarios de la sanidad pública en el sur de la provincia de Lugo recurren al teléfono para pasar consulta con su médico, en lugar de acudir en persona al centro de salud que les corresponde. Es lo que se desprende de las estadísticas de uso de este servicio durante el año 2017 que dio a conocer ayer la Consellería de Sanidade, que considera que el incremento progresivo de este método y el hecho de que los pacientes que recurren a este método suelen repetir demuestra que se trata de una alternativa útil y bien valorada por los usuarios.
Los residentes en los trece municipios que forman el área sanitaria de Monforte generaron durante el 2017 un total de 44.490 citas para consultas telefónicas. Este servicio está disponible para todas las consultas que se prestan en atención primaria. La gran mayoría de estas consultas por teléfono tuvieron como destinatarios a los médicos de familia, pero también las recibieron los servicios de pediatría, enfermería, matronas, odontología preventiva y trabajo social. Los dieciséis centros de salud y consultorios médicos de estos trece municipios gestionaron en ese mismo período 292.523 consultas, así que las telefónicas suponen algo más de un 12% del total.
Este servicio empezó a implantarse en el 2015, pero su extensión fue gradual. El año pasado ya estuvo disponible en todo el territorio gallego.
En la montaña de O Courel lo usan mucho más
Monforte y Chantada son los municipios que generan más consultas telefónicas, con 17.538 y 5.403, respectivamente. En tercer lugar está O Saviñao, con 4.811. Estos datos son los esperables porque se trata de los tres municipios con más población del área sanitaria de Monforte. Más sorprendente es la alta tasa de uso de Folgoso do Courel. Los dos centros de salud de este municipio atendieron en el 2017 un total de 1.467 consultas por teléfono. Puede parecer una cifra modesta, pero es que en Folgoso do Courel hay empadronados poco más de mil vecinos. En Bóveda, con 1.500 hubo solo 295 consultas telefónicas el año pasado. En Sober, con más del doble de habitantes que Folgoso do Courel, fueron 1.291. De la comparación de estas cifras se deduce que la utilización de este recurso que evita que el usuario tenga que desplazarse hasta su centro de salud de referencia es mayor en las zonas de orografía complicada y, por tanto, en las que moverse en coche es más difícil.