Tomé se jugará la baza de la moción de censura para aprobar los presupuestos

Luis Díaz
LUIS DÍAZ MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

CARLOS CORTÉS

PP y no adscritos abren la puerta a un posible acuerdo «polo ben de Monforte»

28 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Tres grupos de la oposición se aliaron el pasado mes de junio para sacar adelante una propuesta de reprobación del alcalde. Aquel acuerdo no tenía trascendencia práctica, pero permitió a PP, no adscritos y Esperta Monforte marcar distancias con el «autoritarismo» de Tomé. También le negarán su confianza en la sesión extraordinaria de esta tarde, en un nuevo intento de aprobar los presupuestos. Para el gobierno en minoría del PSOE, será el segundo portazo a las cuentas del 2018 en poco más de una semana. Quedarán aprobadas de forma automática si, en el plazo de un mes, no hay acuerdo sobre una moción de censura. «No tenemos nada decidido, pero acaba de abrirse una posibilidad», avisa la portavoz popular Julia Rodríguez.

Los presupuestos fueron rechazados inicialmente por el pleno el 18 de diciembre con cinco votos en contra del PP, cuatro de los no adscritos y uno de Esperta Monforte. El único concejal del BNG -grupo del que se escindieron este verano los no adscritos- optó por abstenerse, lo mismo que cuando fue debatida la reprobación de Tomé. Pero esa neutralidad de poco le sirve a los socialistas, que gobiernan con seis de los diecisiete ediles de la corporación.

Mayoría inalcanzable

PP y no adscritos avanzan que votarán de nuevo en contra la cuestión de confianza a la que el alcalde supedita la aprobación de las cuentas, con lo que se abre la puerta para la presentación de una moción de censura. En condiciones normales, sus nueve votos serían suficientes para impulsarla. Pero esta posibilidad estaba condicionada hasta ahora por más razones que las distancias políticas. La ley antitransfuguismo del 2011 penaliza a los concejales que cambian de grupo y apoyan cambios de gobierno. En este supuesto, se requiere un voto más por cada uno de ellos. Al ser cuatro los no adscritos, la mayoría necesaria en Monforte sería de trece ediles. Por tanto, tendría que ser apoyada desde el propio grupo de Tomé.

Cambios legales

La novedad a la que se refiere la portavoz del PP es una reciente sentencia del Tribunal Constitucional, a raíz de un recurso del Tribunal Superior de Justicia de Canarias, que dejaría sin validez la ley antitransfuguismo. Aunque el fallo todavía no fue publicado, Julia Rodríguez afirma tener constancia de su existencia y solicitó un informe jurídico «sobre sus posibles consecuencias» en las mayorías necesarias para promover cambios de gobierno. De momento, lo que tiene decidido este partido es su rechazo a la cuestión de confianza en el pleno de esta tarde. «Apoyarla sería incongruente con la posición que mantuvimos en el debate de los presupuestos», apunta la concejala del PP.

Los no adscritos tampoco respaldarán esta nueva fórmula a la que recurre Tomé para tratar de desbloquear los presupuestos del 2018. «Non podemos cambiar o voto porque non podemos confiar no alcalde», dice la portavoz de este grupo, Pilar López. La razón de esta desconfianza sería el «incumplimiento» de los compromisos que adquirió Tomé cuando el BNG -antes de la escisión- se abstuvo para facilitar la aprobación de los actuales presupuestos.

El alcalde dice que son ganas de «enredar» y el concejal del BNG marca distancias

Tomé ya se vio forzado a supeditar la entrada en vigor de los presupuestos del 2016 a una moción de censura. Los grupos de la oposición tensaron entonces la cuerda hasta el final, pero no llegaron a presentar un candidato alternativo. PP y no adscritos tampoco descartan ahora un posible entendimiento. «Faremos o que nos permita a lei, sempre pensando no beneficio de Monforte», dice Pilar López, en representación de este último grupo. Para la portavoz popular, Julia Rodríguez, un cambio político debería ser impulsado «por toda la oposición». Pero en estos momentos no parece que el concejal del BNG esté muy por la labor. «Falar hai que falar con todo o mundo, pero paréceme unha posibilidade moi remota», sostiene Emilio Sánchez.

El alcalde, por su parte, prefiere no entrar al trapo. «O meu non é enredar nin alimentar polémicas. Para iso están outros, e xa o están a facer», señala. Tomé también se interesó por la sentencia del Constitucional que invalidaría las trabas que pone la ley antitransfuguismo a los concejales que cambian de grupo a la hora de apoyar mociones de censura. La información de que dispone apunta a que no habrá cambios al menos por ahora. «Parece ser que a lei declararase inconstitucional, pero haberá un tempo para reformala no que non se vería afectada para evitar inseguridade xurídica», explica.

Un mes de plazo para que se defina la oposición

Si se consuma el rechazo a la cuestión de confianza que se vota esta tarde en el pleno, la aprobación de los presupuestos quedará supeditada a una moción de confianza. Los grupos de la oposición tendrán de plazo hasta el 29 de enero para formularla. Si no lo hacen, las cuentas quedarán aprobadas automáticamente. No obstante, hasta su entrada en vigor deberá transcurrir un mes más de exposición pública.