El ingeniero agrícola Jesús Ortega, distinguido con el Billó de Ouro

La Voz CHANTADA / LA VOZ

LEMOS

ROI FERNANDEZ

01 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La Asociación Cultural e Gastronómica Luso-Galaica escogió a al ingeniero agrícola Jesús Ortega Carrasco para otorgar este año el Billó de Ouro, una distinción que esta entidad conceder a las personas e instituciones que se han significado de alguna manera en la potenciación de la comarca de Chantada, ya sea en el aspecto social, empresarial, cultural, político o gastronómico. El galardón será entregado en una cena que se celebrará el viernes -a partir de las 21 horas- en el restaurante Os Pendellos. Las invitaciones para el acto pueden retirarse al precio de veinticinco euros.

Nacido en 1946 en la localidad de Mazarete, en la provincia de Guadalajara, Jesús Ortega cursó estudios universitarios en Madrid y obtuvo el título de agente de extensión agraria en 1970. Desempeñó primeramente este cargo en la provincia de Teruel y en 1972 fue destinado a la comarca de Chantada, donde siguió ejerciendo como tal hasta 1985. Posteriormente, desde ese año hasta 1990, trabajó como responsable de la agencia de Extensión Agraria de Monterroso. Entre 1990 y 1994 fue jefe de los servicios de defensa contra incendios forestales de Chantada y más tarde ocupó los cargos de jefe de estudios y director del centro de formación y experimentación agroforestal de Boqueixón, donde se jubilaría en el 2011.

Múltiples iniciativas

La asociación que concede el Billó de Ouro señala que al margen de su carrera profesional Jesús Ortega fue concejal de la primera corporación democrática chantadina tras las elecciones de 1977 y participó en el comité organizador de la primera edición de la Feira do Viño de Chantada y en la fundación de la primera asociación Val do Asma, la primera de carácter cultural que tuvo el municipio. En la actualidad, Ortega es secretario de la asociación vecinal del barrio chantadina de A Alameda y forma parte de la directiva de la asociación Camiños a Santiago pola Ribeira Sacra, que ayudó a conseguir el reconocimiento oficial del Camino de Invierno.