La sequía merma la producción de aceituna, un sector en auge en Galicia

María Cobas Vázquez
maría cobas O BARCO / LA VOZ

LEMOS

ROI FERNANDEZ

Las plantaciones son jóvenes, por lo que cada año dan más cantidad de fruto

29 oct 2017 . Actualizado a las 08:37 h.

La cosecha de aceituna está en marcha en la provincia. Hace ya casi un mes que comenzó, en una campaña que ha venido adelantada (como también lo fue en el caso de la uva, la patata o la castaña) debido a la falta de agua. La sequía ha provocado que el fruto madure antes y traiga un tamaño menor del que debería tener, lo que redundará en una caída del 20 % sobre la cosecha esperada. Eso no significa, como pasa en el resto de sectores mencionados, en que sea menor que la del año pasado. Al contrario, sigue creciendo, debido al hecho de que las plantaciones en Ourense todavía son jóvenes y no han llegado a su máximo de producción.

«A maioría das plantacións teñen entre tres e cinco anos, e están aumentado produción, porque ata os oito ou así non se estabilizan as oliveiras plantadas en superextensivo», explica José Antonio Marcos, dueño de un olivar en Valdeorras y tesorero de la Asociación de Productores de Aceite y Aceitunas de Galicia (AGAP). Los olivos plantados de manera «tradicional», sin aprovechar tanto el suelo, pueden tardar hasta 15 años en llegar a su máxima producción. Así que la cosecha de aceituna en Galicia sigue creciendo, y en unos 150.000 kilos la cifran desde AGAP, aunque recalcan que se trata de los datos de su casi centenar de socios (reconociendo que puede haber sobre otros 200 productores más en las cuatro provincias, fundamentalmente en Ourense y Pontevedra). Siguen creciendo las cosechas y también las plantaciones, en un sector que es un cultivo complementario para los productores.

La aceituna de este año es más pequeña que la del pasado, aunque de calidad excelente de forma general. Pero la frase hay que leerla con reservas. «Agora hai que deixar que o produto decante e estabilice ao saír da almazara», explica Marcos. Además, ante la sequía, hubo quien abusó del riego y finalmente la producción será menor, puesto que las aceitunas crecieron, pero llevan demasiada agua, apunta el presidente de AGAP, José Antonio García.

La producción ourensana (que se concentra fundamentalmente en Valdeorras, Ribadavia y la capital) va para aceite. Lo de las aceitunas de mesa no se da en la provincia. «Hai colleiteiros que sacan a súa propia marca, pero fundamentalmente a produción cómprana almazaras que teñen marcas rexistradas», señala Marcos, que cita entonces a marcas como Ouro de Quiroga o Aceites Figueiredo, así como Abril.

Precio alto

El aceite producido en Galicia está teniendo una buena salida en el mercado, explican desde el sector. Y se mueve a un precio alto, que puede rondar los 20 euros el litro (aunque se vende en tamaño Gourmet que suele ser de 250 mililitros la botella). «O prezo do litro depende da calidade e da variedade de oliva, as autóctonas van máis caras, e as foráneas máis baratas», explica Marcos. ¿Y el kilo de aceituna? Pues lo mismo. El productor puede cobrar entre 80 céntimos y los 1,5 euros; aunque el precio puede subir en condiciones especiales de la aceituna. Precisamente para garantizar los mejores precios, desde AGAP promueven la plantación de las variedades autóctonas como son la brava y la mansa. «As máis comúns son arbequina e picual; arbequina foi da que máis se plantou, crendo que sería das máis óptimas en produción, e parece que non», resalta Marcos, que recalca que la asociación trabaja con el banco de germoplasma de Córdoba para tratar de identificar todas las variedades realmente gallegas que existen.

Un árbol con 30 años al máximo rendimiento

Existen los olivos centenarios, aunque es cierto que no están a esas edades para grandes producciones. Aún así, es un árbol al que se le puede sacar rendimiento económico durante muchos años. En las plantaciones donde los olivos cuentan con mucho terreno para crecer, la producción es casi «indefinida», señala José Antonio Marcos, de AGAP. Una vez que el árbol va cogiendo mucha madera (y en consecuencia, bajando la producción) se puede hacer una poda de regeneración y el olivo producirá de nuevo al máximo en unos cuatro o cinco años. En el caso de las plantaciones que buscan el máximo aprovechamiento del suelo, el árbol tiene una vida útil de unos 25 o 30 años. «A cantidade de madeira que se xera é tan grande que non colle, por espazo, dentro do marco de plantación pequeno», explica Marcos.

Una denominación de origen

Desde AGAP tienen como objetivo crear una denominación de origen que avale el Aceite de Galicia. Es un proyecto pendiente de la implicación de la Xunta, según explica el presidente del colectivo, José Antonio García. «Tenemos que reunirnos con la Administración para que nos eche una mano para dar los pasos», señala García. Cuenta que hay un bum de plantación de olivos en Galicia, y que, como con todo sector que despunta, no falta la picaresca. «Hay quien trata de utilizar aceite de otras zonas para venderlo como gallego; y eso es lo que tenemos que combatir. Una D.O. sería la mejor forma, porque a día de hoy, trazabilidad ninguna», dice.