La reunión en Santiago abre una brecha política en el área sanitaria

Luis Díaz
LUIS DÍAZ MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

CONCHI PAZ

Los alcaldes del PP se apresuran a posicionarse contra cualquier movilización

25 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

División de opiniones entre los alcaldes del área sanitaria de Monforte tras la reunión de ayer en la Consellería de Sanidade. Los argumentos sobre los pros y contras de la reforma de la Lei de Saúde varían, como era previsible, según los colores políticos. Pero el PP se apresura a marcar distancias ante la llamada de la junta de personal a una nueva manifestación por el hospital. «Imos rexeitar calquera tipo de acto que busque o xogo político e non se centre no realmente importante, que son os nosos veciños», señalan los populares.

A la reunión en Santiago asistieron los mandatarios de cuatro de los siete municipios del área sanitaria gobernados por el PP. No pudieron estar los de Pantón y Carballedo, y de O Saviñao acudió el primer teniente de alcalde, Juan Carlos Armesto. A título particular, los representantes de este partido coincidieron en señalar al término del encuentro que la revisión de la Lei de Saúde está en una fase embrionaria y que por ello las movilizaciones de protesta no tendrían otro sentido que el interés político.

Un aspecto innegociable

«A boa vontade e a disposición ao diálogo da consellería quedan claras nestas reunións. Non vexo motivos para pór en dúbida que a reforma sexa positiva para os pacientes», resume el alcalde de Sober, Luis Fernández Guitián. Sanidade, según desvela, se ofreció a recoger sugerencias de las diferentes áreas sanitarias para modificar algunos aspectos del anteproyecto. La transformación de las áreas sanitarias en distritos, sin embargo, no figura entre las cuestiones negociables.

En un comunicado divulgado a raíz de la reunión, el PP de Lugo se muestra más contundente. Además de agradecer a Sanidade su esfuerzo por «facilitar a participación», deja claro que no seguirá el juego «daqueles partidos que só pretenden confundir á cidadanía lanzando mensaxes alarmistas que nada teñen que ver coa realidade». Según los populares, la nueva normativa supone «unicamente modificacións administrativas, sen ningún tipo de afectación para os doentes».

Desde la óptica de otros partidos, la realidad de la modificación que proyecta Sanidade es muy diferente. «Volvín da reunión moi decepcionado, non entendo moi ben por que se fai. Se a consellería quere resolver unha cuestión laboral, non sei por que nos chama a nós», dice el regidor de Ribas de Sil, el socialista Miguel Sotuela. Quizá por ello, se muestra reservado a la hora de hablar de movilizaciones. «Haberá que agardar a que a consellería poña negro sobre branco», dice.

Por parte del BNG, el alcalde de A Pobra do Brollón, José Luis Maceda, cree que la optimización de recursos que busca Sanidade con la mayor movilidad de los profesionales tendrá consecuencias para los usuarios. «A reforma que preparan é outro paso na política de recortes en Sanidade. Vai haber máis mobilidade para os médicos e serán os pacientes os que paguen as consecuencias», apunta Maceda.

Tomé quiere reunirse con la junta de personal antes de hablar de manifestaciones

La reunión de ayer en Santiago estuvo presidida por el conselleiro, Jesús Vázquez Almuiña, y el secretario xeral de Sanidade, Alberto Fuentes. Por parte del Sergas, las explicaciones corrieron a cargo del gerente, Antonio Fernández-Campa; del director xeral de Asistencia Sanitaria, Jorge Aboal; y de la directora xeral de Recursos Humanos, Margarita Prado. También estuvieron presentes los gerentes del área de gestión integrada de Lugo, Ramón Ares, y del hospital comarcal de Monforte, Iván Sanz.

El alcalde de Monforte, José Tomé fue uno de los que tomaron la palabra en la reunión. Los argumentos que escuchó no acaban de convencerle. «Vexo máis necesaria que nunca a celebración do pleno extraordinario», dice Tomé. Respecto a la manifestación por la que abogan los sindicatos del hospital, opta por la prudencia. «O primeiro é falar coa xunta de persoal. A partir de aí, tomaranse as decisións que correspondan», señala.

Médicos «cabreados»

Por su parte, Esperta Monforte tilda de «tomadura de pelo» la reunión en Santiago. Maribel García, que estuvo presente en el encuentro, ironiza sobre la postura de los alcaldes del PP. «Eles din que non cambia nada e na consellería falaron dos cambios que vai haber, aínda que segundo eles sos ‘para ben’», explica la concejala. Este partido considera prioritario informar a la ciudadanía de lo que busca en realidad Sanidade. «Temos que defender un hospital con especialistas propios e non con médicos cabreados que manden doutros centros», afirma su portavoz.