«Hace años que no recuerdo una muerte por sobredosis»

Carlos Cortés
carlos cortés MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

CARLOS CORTÉS

La directora de la unidad monfortina de drogodependencias explica cómo ha cambiado su trabajo

12 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La psiquiatra Ana Fernández Sobrino es la directora de la unidad asistencia de drogodependencias (UAD) de Monforte y junto con la enfermera especialista en salud mental Verónica Fernández, que trabaja en ese mismo servicio, presentó recientemente en el hospital los primeros datos de un informe sobre la evolución en los últimos veinte años del censo de personas a las que dan asistencia. Los datos confirman cambios importantes. Por ejemplo, la adicción a la heroína ha pasado de monopolizar prácticamente su trabajo en 1996 al tercer puesto tras el alcohol y el tabaco.

-¿Ya no hay que preocuparse por la heroína?

-Yo no diría eso. De hecho, seguimos abriendo historias de pacientes nuevos a causa de la heroína. Y son pacientes jóvenes. Hubo unos años en los que prácticamente no llegaban casos nuevos, pero ahora sí los hay. Eso sí, la vía de consumo cambió mucho. Ya no se dan casos de VIH asociados al uso de jeringuillas compartidas, porque ya prácticamente nadie se la inyecta. En tiempos teníamos un programa de intercambio de jeringuillas que hoy ya no es necesario.

-¿El perfil de las personas que atienden es muy distinto hoy al de hace veinte años?

-Es bastante distinto y no solo porque la droga principal ya no sea la heroína. La edad media es mayor, el porcentaje de mujeres se ha duplicado y si antes eran solo el 12% del total hoy son el 24%.

-¿Por qué ahora hay el doble de mujeres que antes?

-Porque si antes atendíamos casi en exclusiva casos de adicción a drogas ilegales, ahora han ganado peso las drogas legales. Y estadísticamente las mujeres vienen más por drogas legales, como el tabaco o el alcohol. Antes era casi todo heroína, y ahora el abanico de sustancias es mucho más amplio.

-¿Qué suponen estos cambios para la UAD?

-Que nos tenemos que adaptar. Por ejemplo, antes la monitora de tiempo libre trataba sobre todo de que los pacientes, la mayoría heroinómanos, pasasen tiempo en la unidad, porque mientras estuviesen aquí no consumían. Ahora, en cambio, de lo que se trata es de que hagan algo más, que busquen ofertas de empleo, que sepan como responder en una entrevista de trabajo... Y además de que debemos adaptarnos, hay otros cambios. Hoy tenemos muchas menos muertes de pacientes. Hace años que no recuerdo una muerte por sobredosis.

-¿Necesitan otro tipo de profesionales en la unidad?

-No, lo que necesitamos es un equipo multidisciplinar como el que ya tenemos.

-¿Se atreve a imaginar cómo cambiarán las cosas en los próximos diez años?

-Cada vez hay más drogas de síntesis y ese probablemente va a ser un campo de trabajo amplio en el futuro. En todo caso, hoy por hoy todavía no atendemos a nadie por drogas de síntesis