Retrato de un ilustre y poco conocido personaje histórico de Monforte

Francisco Albo
francisco albo MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

roi fernández

El fundador del pazo de Antero estará presente en una exposición conmemorativa sobre Carlos III

22 sep 2016 . Actualizado a las 12:52 h.

En el pazo Molinos de Antero se conserva una gran parte de la herenciade uno de los personajes históricos más notables y al mismo tiempo menos conocidos de Monforte. El fundador de la casa, el hidalgo Manuel Antero Yáñez Rivadeneira, ocupó un destacado papel en las tierras del sur lucense entre los siglos XVIII y XIX y dejó un vasto legado -principalmente archivístico- que encierra una gran cantidad de información acerca de ese período histórico. Un retrato suyo que se conserva en el pazo será trasladado próximamente a Madrid por otro motivo: es uno de los pocos que conservan en toda España en los que aparece un personaje luciendo el manto de la Orden de Carlos III y por ello será mostrado en una exposición que se inagurará el día 19 en la Real Casa de la Moneda coincidiendo con el 245 aniversario de la creación de esta institución.

Manuel Antero Yáñez Ribadeneira fue distinguido con esta orden por Fernando VII en reconocimiento por sus servicios a la corona. La cruz que simboliza esta orden -con el lema latino Virtute et Merito- ha formado parte desde entonces del escudo de armas de su familia y se repite en las pinturas murales que decoran el interior del pazo. Durante la guerra napoleónica se distinguió por el apoyo que prestó al marqués de La Romana en su lucha contra los invasores franceses. Algún tiempo antes, en 1806, ocupó el cargo de administrador y custodio de las rentas -es decir, jefe de los recaudadores de impuestos- de Monforte y otras comarcas gallegas. Más tarde, en 1818, fue nombrado apoderado general de la Encomienda de Quiroga, regida por la Orden de Malta. Desempeñó también el cargo de regidor perpetuo de Monforte, al igual que lo había sido su padre.

Debido al hecho de haber ocupado todos estos cargos, Manuel Antero Yáñez acumuló en su pazo una enorme cantidad de documentos que se ha conservado en gran parte hasta la actualidad. En estos legajos se encuentran miles de datos de gran interés para reconstruir no solo la historia social y económica de Monforte sino también de otras zonas de Galicia -y del Bierzo- que en su día pertenecieron a la Encomienda de Quiroga.

El actual propietario del pazo, Matías Yáñez Carballada -profesor de comercio retirado- ha pasado años ordenando pacientemente estos documentos, que resulta de gran interés para los investigadores. De este archivo histórico salió gran parte de la documentación utilizada en la obra Las encomiendas gallegas de la Orden Militar de San Juan de Jerusalén, de los historiadores Isidro García Tato y Eleutino Álvarez, publicado en tres volúmenes por el Instituto de Estudios Gallegos Padre Sarmiento entre el 2010 y el 2012.

Manuel Antero Yáñez dejó un legado archivístico de gran valor para los historiadores

Un cuadro pintado por un artista anónimo en una fecha que se desconoce

Nacido el 3 de enero de 1781 y fallecido el 11 de junio de 1850, Manuel Antero Yáñez Rivadeneira fue el séptimo hijo de Pedro Yáñez Gayoso y de Rosa Estefanía Rivadeneira Quiroga y Losada. Su vida discurrió entre Monforte, Madrid y Valladolid. Tuvo cinco hijos, todos los cuales se licenciaron en leyes y ocuparon diferentes cargos, como el de alcalde de Monforte y diputado en Cortes.

El retrato que se conserva en Monforte fue pintado en una fecha indeterminada por un artista cuyo nombre no se conoce. Esta será la primera vez que el cuadro salga del pazo desde la época en la que fue pintado. En la Real Casa de la Moneda se exhibirá junto con los retratos de varios reyes y caballeros que recibieron la misma distinción y que lucieron el traje que la representa.

Camino de Invierno

Según explica explica Matías Yáñez, la vida de Manuel Antero Yáñez Rivadeneira y de su familia está por otra parte estrechamente vinculada con la historia del Camino de Invierno. El antiguo camino real de Castilla que atravesaba Monforte -y que coincide con esta ruta histórica- pasaba al lado del pazo. Junto a esta construcción había una posada donde los viajeros pernoctaban y cambiaban las caballerías. «En cierta época, la posadera era precisamente la mujer del capataz del pazo», señala. En el archivo histórico guardado en la residencia, por otro lado, hay muchos documentos relativos al tránsito de viajeros y mercancías por este itinerario que aún están sin estudiar a fondo.