Pudo sufrir un desvanecimiento o quedarse dormido al volante
02 ago 2016 . Actualizado a las 13:02 h.El conductor monfortino fallecido en el accidente de tráfico registrado ayer en el puente del Miño conocía bien el tramo de carretera en el que se produjo el suceso. Pasaba por allí prácticamente a diario para ir y venir de su trabajo en Monterroso. Sobre el asfalto no quedaron huellas de frenada, así que todo apunta a que la víctima pudo sufrir una indisposición o quedarse dormido.
El accidente se produjo a las cuatro menos veinte de la tarde cuando el coche de la víctima, un Ford Mondeo, acababa de cruzar el puente sobre el Miño. En lugar de tomar la pronunciada curva a la izquierda que hace la calzada en este punto, siguió de frente y chocó contra el talud de la cuneta.
Consternación en As Cruces
El accidente causó consternación en el barrio monfortino de As Cruces, donde el fallecido vivía con su familia. Julio José Rodríguez Carnero, que en noviembre habría cumplido 46 años, trabajaba desde hace tiempo como auxiliar de clínica en la prisión de Monterroso.
No es la primera vez que su familia se ve sacudida por un accidente de tráfico con resultado fatal. A finales del 2003, una prima suya murió en un choque frontal en la carretera N-120. Aquel siniestro ocurrió también en un puente, el de Canaval (Sober). El coche en el que iba la fallecida sufrió una colisión frontal con otro vehículo. A consecuencia del impacto, murieron en el acto ella y el conductor del otro coche.