El hombre que se llevó a su hijo a Rabat afirma que la custodia es suya

Carlos Cortés
carlos cortés MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

Angela Tyudoki muestra una foto de su hijo en la zona de juegos infantiles de la Compañía.
Angela Tyudoki muestra una foto de su hijo en la zona de juegos infantiles de la Compañía. roi fernández

Eso es lo que les dijo a los policías marroquíes que fueron a su casa a comprobar si estaba el niño

05 may 2016 . Actualizado a las 08:55 h.

El hombre que retiene en Marruecos desde hace cuatro años a su hijo monfortino le dijo a la policía de aquel país que la custodia del niño era suya. Así consta en un informe de las fuerzas de seguridad marroquíes enviado al juzgado de Monforte que había dictado una orden internacional de localización de Mohamed B. después de que su entonces pareja y madre del niño denunciase que se lo había llevado sin su consentimiento la noche del 12 de julio del 2012.

Después de que el juzgado número uno de Monforte emitiese esa orden, en el marco de una investigación por sustracción de menor, agentes de la policía marroquí se presentaron en la casa en la que vive Mohamed B. No les fue difícil dar con él, porque la madre conoce la dirección. Es una casa situada en las cercanías de Rabat, la capital del país, en la que viven dos hermanas del denunciado y en la que incluso había estado su expareja en alguna ocasión, con motivo de un viaje que ambos habían hecho a Marruecos anteriormente.

El informe enviado al juzgado monfortino por las autoridades marroquíes recoge las declaraciones de Mohamed B., que asegura que dispone de una resolución judicial de ese país que la concede la custodia del niño. Según aquel informe, también les dijo a los agentes que fueron a su casa que el chaval se encontraba bien de salud y que se lo había llevado de España de acuerdo con la madre.

 

La decisión de la jueza

La entonces titular del juzgado de instrucción examinó la información llegada de Marruecos y llamó a declarar de nuevo a la madre, Angela Tyukodi, una mujer nacida en Rumanía que hoy tiene 24 años. Después de que la denunciante admitiese que tenía contacto con su expareja -se cruzaban mensajes escritos a través de Internet y hablaban de vez en cuanto por Skype-, la jueza decidió archivar el caso.

La Audiencia Provincial estimó poco después un recurso presentado contra esta decisión y ordenó al juzgado monfortino que abriese de nuevo las diligencias, al menos para asegurarse de que el niño se encuentra bien de salud. En la actualidad, el caso sigue abierto. La jueza que dirige ahora el juzgado número dos de Monforte incluso ha tomado la decisión de declarar este asunto como una causa compleja, lo que impide que haya que cerrarlo sin resultados por el tiempo transcurrido desde aquella noche del julio del 2012.

 

La versión contraria

Las declaraciones que hizo el padre a los policías marroquíes que fueron a buscarlo a su casa chocan con la versión de la madre y con las propias resoluciones judiciales adoptadas en Monforte en torno a este caso.

En su declaración en comisaría, la madre admite que habían discutido unos días antes porque su entonces pareja quería irse de vacaciones a Marruecos y ella prefería quedarse en Monforte porque tenía trabajo. En cualquier caso, tanto ante en su momento ante la policía y en el juzgado como cuando esta semana decidió contarlo públicamente, Angela ha insistido siempre en que Mohamed B. se llevó al niño sin ella saberlo y sin su consentimiento. También es llamativo que él afirme tener la custodia, porque el juzgado número dos de Monforte se la reconoció a la madre en una resolución dictada el 22 de febrero del 2013, ocho meses después de la marcha del padre a Marruecos con el niño.

La premisa de que quien decide es el juez del lugar de residencia habitual

Tanto España como Marruecos son firmantes del convenio de La Haya sobre sustracción internacional de menores, concebido para evitar que el traslado de un niño a otro país por parte de uno de los progenitores altere el foro judicial competente para decidir sobre su custodia. El convenio parte de la base de que el juez legitimado para decidir sobre la custodia del menor es el del lugar de residencia habitual del niño antes de su traslado. Eso sí, este acuerdo internacional también tiene en cuenta el tiempo transcurrido desde la sustracción ilegal y el arraigo que el niño puede tener en su nuevo país. El convenio fue ratificado por España en 1987 y por Marruecos en el 2011, solo un año antes de que Mohamed B. decidiese marcharse con su hijo a Rabat.

Una jueza archivó el caso tras recibir estas declaraciones, aunque después tuvo que reabrirlo