Un recorrido a fondo por la vida y la obra de Antonio Casares

Francisco Albo
francisco albo MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

<span lang= es-es >Laboratorio histórico</span>. Los instrumentos científicos originales de Casares se exhibieron en el 2007 en una exposición que la Facultade de Farmacia de Santiago organizó con motivo del 150 aniversario de su fundación. A la izquierda, un retrato del científico monfortino.
Laboratorio histórico. Los instrumentos científicos originales de Casares se exhibieron en el 2007 en una exposición que la Facultade de Farmacia de Santiago organizó con motivo del 150 aniversario de su fundación. A la izquierda, un retrato del científico monfortino. paco rodríguez < / span>

Una tesis sobre el histórico científico monfortino recibió un doctorado cum laude en la USC

16 mar 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La historiadora monfortina María Luisa Losada Sanmartín obtuvo recientemente un doctorado cum laude en la Universidade de Santiago con una tesis doctoral dedicada al célebre científico Antonio Casares, al que ya había dedicado anteriormente otros trabajos. La tesis, titulada Antonio Casares. Ideología, ciencia y sociedad en la Universidad de Santiago en el siglo XIX, es una de las obras de mayores dimensiones que se han publicado hasta ahora sobre el químico monfortino.

La autora señala que el trabajo consiste en «una investigación en historia social y cultural de la ciencia» que gira en torno a una personalidad sumamente compleja. Losada apunta que lo que otorga al científico un especial interés en este terreno es su capacidad «para transitar entre ambientes académicos y no académicos, públicos y privados, la ciencia espectáculo y el laboratorio, la política, la enseñanza, la publicación de artículos y libros, la química y la medicina».

La obra no se limita a estudiar y exponer la actividad científica y docente desarrollada por Casares, sino que también presta gran atención a las relaciones que estableció en su contexto social, académico y profesional, así como a su poco conocida pero importante actuación en el terreno de la política. El estudio se ha basado en gran parte en documentos inéditos, que la autora localizó en diversos archivos históricos, entre ellos los del Ayuntamiento de Monforte y del pazo de Antero. La documentación estudiada también incluye cartas privadas de Casares que conservaron sus descendientes.

Trato con otros científicos

Una parte de la tesis aborda la relación de Casares con otros científicos gallegos de su época, entre los que destacan el matemático y economista Vicente Vázquez Queipo -natural de Samos- y el naturalista ferrolano Víctor López Seoane. La autora recuperó correspondencia inédita entre Casares y este último investigador, en la que ambos intercambian opiniones profesionales y también aluden a las grandes dificultades que había para desarrollar actividades científicas en un medio tan adverso como la Galicia del siglo XIX. En una carta, Casares se describe a sí mismo y a López Seoane como «aislados en un extremo de la península, entregados por tanto a nuestras débiles fuerzas».

El estudio de María Luisa Losada dedica un amplio espacio al único viaje al extranjero que realizó Casares en toda su vida -a París, en 1850-, que tuvo una gran repercusión en su actividad científica y en su figura pública. En la capital francesa se encontró con el químico y físico belga César Despretz, que por entonces efectuaba experimentos con arcos voltaicos. En esa época ya se habían realizado en París y Londres demostraciones públicas con máquinas capaces de generar luz eléctrica, y de ese viaje Casares trajo probablemente la idea de organizar una exhibición de este tipo en Santiago. La experiencia -la primera que se llevó a cabo en España- se efectuó el 2 de abril de 1851 e incrementó de forma espectacular el prestigio del científico.

La tesis también se ocupa ampliamente de otra experiencia pionera de Casares: su participación en una de las dos primeras operaciones quirúrgicas realizadas en España con anestesia por cloroformo, que se llevó a cabo en Santiago en diciembre de 1847. La obra destaca el hecho de que una de las grandes preocupaciones de Casares consistió en buscar aplicaciones prácticas a los descubrimientos científicos de su tiempo y señala que también se esforzó para que el conocimiento de las posibilidades de estos hallazgos llegase a calar profundamente en la sociedad. «Casares sabía de la importancia de la opinión pública y la publicada, utilizó los medios a su disposición para conseguir que su autoridad y la de la disciplina que ejercía fuesen reconocidas no solo en ámbitos académicos, sino por la sociedad en general», apunta la autora.

Una figura de gran importancia a la que se han dedicado muy pocos estudios monográficos

La gran mayoría de las publicaciones sobre Antonio Casares consisten en artículos que fueron editados -desde el siglo XIX hasta hoy- en multitud de revistas y en libros colectivos. La primera obra monográfica que se le dedicó es una tesis doctoral presentada en el 2012 en la USC por Ramón Cid Manzano. Este estudio se centra sobre todo en la labor desarrollada por el científico monfortino en el campo de la química y la influencia que tuvo en la enseñanza de esta ciencia en la universidad compostelana.

Poco después, la editorial Ouvirmos publicó Antonio Casares Rodríguez, médico, químico e farmacéutico, de María Luisa Losada. Esta obra, dirigida a un público no especializado, inauguró una colección de libros divulgativos sobre los principales científicos gallegos. Otra importante aportación a la bibliografía sobre Antonio Casares es el libro A noite está varrida da terra, que sirvió de catálogo a la exposición homónima con la que se conmemoró en el 2001 el 150 aniversario de la experiencia con iluminación eléctrica que llevó a cabo Casares en Santiago. La obra, en la que colaboraron varios especialistas, fue editada por el Consello da Cultura Galega.