La investigación del Paleolítico del sur lucense cumple una década

Francisco Albo
francisco albo MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

Un aspecto de la última campaña de excavaciones en Cova Eirós, realizada el pasado agosto.
Un aspecto de la última campaña de excavaciones en Cova Eirós, realizada el pasado agosto. roi fernández< / span>

La Universidad de Santiago no dispone por ahora de fondos para continuar las excavaciones en el 2016

02 ene 2016 . Actualizado a las 13:20 h.

Hace ahora diez años se llevaban a cabo los preparativos para la puesta en marcha del proyecto arqueológico «Ocupaciones humanas durante el Pleistoceno de la cuenca media del Miño», coordinado por la Universidad de Santiago, que empezó a desarrollarse en Monforte en abril del 2006. Los trabajos de campo que se llevan a cabo dentro de este plan se centran actualmente en el conocido yacimiento paleolítico de Cova Eirós, en Triacastela. Por ahora, la USC no dispone de fondos para financiar una nueva campaña de excavaciones, puesto que la subvención concedida este año por la Consellería de Cultura para continuar los trabajos -de unos 30.000 euros- ya está totalmente agotada.

El equipo que lleva a cabo las excavaciones iniciará en breve negociaciones con diferentes entidades -la Xunta, la Diputación lucense y el Ayuntamiento de Triacastela- a fin de conseguir un apoyo económico para que los trabajos no se interrumpan. El proyecto ya tropezó con problemas de financiación hace dos años, al no poder conseguir una de las ayudas para investigación científica del Ministerio de Economía. Por tal motivo, durante ese año y el siguiente hubo que reducir las campañas de excavación a dos semanas, en vez de las tres o cuatro que eran habituales. El apoyo económico de la Xunta permitió que este año se recuperase el ritmo normal.

Un caso excepcional

Este proyecto es el único dedicado al estudio de los yacimientos paleolíticos gallegos que se ha podido desarrollar de forma ininterrumpida a lo largo de una década. También destaca por haberse llevado a cabo de forma simultánea en varios yacimientos situados en diferentes territorios. En Galicia, las investigaciones sobre la prehistoria remota se han centrado habitualmente en un solo yacimiento y han comprendido a menudo una única campaña de excavaciones, o cuando mucho dos o tres.

«En Cova Eirós hay para excavar al menos otros cuatro o cinco años»

El arqueólogo Arturo de Lombera Hermida ha codirigido los trabajos de campo realizados en los yacimientos paleolíticos del valle de Lemos y Triacastela desde el 2006.

-¿En qué estado se hallan las excavaciones de Cova Eirós?

-En la campaña del pasado verano empezamos a agotar el llamado nivel 4, que corresponde a ocupaciones del hombre de Neandertal de hace unos 118.000 años. Por debajo de este nivel descubrimos otro más antiguo, pero por ahora no hicimos más que arañarlo. Por lo que sacamos hasta el momento parece que es menos abundante en materiales arqueológicos que los niveles superiores, pero es muy interesante porque nos lleva a un período que aún no teníamos registrado en este yacimiento.

-¿Este nuevo nivel también pertenece a poblaciones del hombre de Neandertal?

-Sí, las piezas que se extrajeron hasta ahora también se encuadran en el Paleolítico Medio, aunque de una etapa más antigua.

Pero este nuevo nivel aún no está bien caracterizado, que es algo que habrá que hacer a partir de la próxima campaña.

-¿Hay otros aspectos que estén pendientes en este momento?

-En los próximos meses deben salir los resultados de una nueva datación radiométrica en el nivel arqueológico 3, al que se asignó provisionalmente una antigüedad de en torno a 84.000 años. Al examinarlo más a fondo encontramos indicios de que puede ser de una época más reciente, así que decidimos datarlo otra vez para confirmar esta suposición. También hay que completar el estudio de las pinturas y los grabados rupestres que se encontraron en la galería interior de la gruta. Y más adelante habrá que abordar un plan de conservación de la cueva. Además de todo esto, hay que seguir analizando las industrias y los fósiles que se encontraron en las campañas que se llevaron a cabo hasta ahora. Esta parte del trabajo está lejos de estar terminada, porque hay muchísimo material para estudiar. Es un yacimiento muy complejo y hay varios frentes de investigación abiertos.

-¿Cuánto tiempo hará falta para terminar el estudio de este yacimiento?

-No lo podemos saber, porque los sondeos con georradar indican que por debajo de lo que se excavó hasta ahora aún hay mucho sedimento y no sabemos cuántos materiales puede contener. Pero por lo que tenemos examinado hasta ahora, calculamos que hay para excavar al menos otros cuatro o cinco años. Ese el tiempo que creemos que nos llevará explorar por completo el nuevo nivel que apareció bajo el nivel 4. Por debajo podría haber todavía más cosas, pero eso no puede saberse por ahora.

Un proyecto científico de largo alcance que se desarrolla en varios frentes

El proyecto «Ocupaciones humanas durante el Pleistoceno de la cuenca media del Miño» se ha desarrollado en varios espacios geográficos.

Valle de Lemos. Los investigadores estudiaron yacimientos situados principalmente en Monforte, pero también en Bóveda, Sober y O Saviñao. En este territorio se pudo localizar cerca de un centenar de puntos de interés entre el 2006 y el 2010. Entre ellos destaca especialmente el yacimiento monfortino del monte de Valverde, el primero y único del período Solutrense que se conoce por ahora en Galicia.

Comarca de Quiroga. Dentro del mismo proyecto se realizaron prospecciones arqueológicas en el lugar de Gándara Chá -en el municipio de Quiroga- y la Cova do Xato, en la sierra de O Courel.

Triacastela. En este municipio se sitúa el yacimiento de Cova Eiró. Este lugar contiene el rastro más importante de los hombres de Neandertal registrado hasta en el noroeste ibérico y las únicas muestras de arte rupuestre paleolítico descubiertas en Galicia. Las excavaciones comenzaron en el 2007 y siguen desarrollándose en la actualidad.

Becerreá. Los trabajos en este municipio se centraron en dos yacimientos. Por un lado, la cueva de Valdavara, en la que se descubrieron industrias y restos fósiles de varias épocas. Cerca de esta gruta, en una cantera de la empresa Campesa, se descubrió en el 2009 el más importante yacimiento gallego de fósiles de animales del Pleistoceno.

Un aniversario para el que aún no hay prevista ninguna celebración

Los responsables del proyecto arqueológico consideran que sería muy interesante organizar de cara al 2016 alguna actividad divulgativa para conmemorar el décimo aniversario de su puesta en marcha. Lo más lógico sería llevarla a cabo en Monforte, ya que en este municipio fue donde empezó a desarrollarse el plan. Pero por ahora no hay nada previsto a este respecto.

El arqueólogo Arturo de Lombera reconoce que el equipo de investigación todavía no planteó nada en este sentido. «Más que nada ha sido por falta de tiempo, porque estuvimos muy ocupados analizando los materiales y los datos que se obtuvieron en los diferentes yacimientos y preparando publicaciones», apunta. «Pero por ahora tampoco nadie nos pidió nada desde el Ayuntamiento de Monforte o desde cualquier otra entidad», añade.

A su juicio, una forma de celebrar este aniversario podría ser presentar públicamente un estudio que recoge y resume todos los descubrimientos arqueológicos realizados dentro de este proyecto en Monforte y en otros municipios de la comarca. Este trabajo se está ultimando en la actualidad y se publicará en los próximos meses en una revista especializada.