Un corredor, medio minuto de diferencia

Carlos Cortés
carlos cortés MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

Un coche circula por la LU-546 entre Ribas Altas y A Áspera, con el trazado de la vía rápida al fondo.
Un coche circula por la LU-546 entre Ribas Altas y A Áspera, con el trazado de la vía rápida al fondo. roi fernández< / span>

La carretera nueva lleva de Monforte a Bóveda en 7 minutos y la antigua en 6 y medio

01 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Los 11,7 kilómetros recién abiertos del corredor de Sarria no están absorbiendo todo el tráfico rodado entre Monforte y Bóveda. Ni mucho menos. Es pronto para que haya estimaciones oficiales, pero basta con hacer ese itinerario por la carretera nueva y por la antigua para comprobarlo. El corredor no sirve para reducir el tiempo de viaje entre estas dos localidades, aunque su trazado más suave hace que sea más cómodo y, al menos a priori, también más seguro que la vieja LU-546.

«Si estoy en Rubián, voy por la nueva, pero desde esta travesía prefiero la de siempre», cuenta el taxista Carlos Lamus sentado en su puesto de trabajo a la espera de recoger a un cliente frente al Ayuntamiento de Bóveda. Igual que él, la mayoría de los vecinos de Bóveda consultados deciden qué rumbo tomar si van a Monforte en función del punto de partida. O de a qué parte en concreto del casco urbano monfortino tienen que ir.

Y tiene todo el sentido. Un recorrido de prueba efectuado por este diario en ambos sentidos y por las dos carreteras una mañana de un día laborable de esta última semana demuestra que, en realidad, lo que se gana en velocidad en el corredor se pierde en el tiempo de entrada y salida a la nueva carretera.

por el corredor

Monforte (acceso norte)-Travesía de Bóveda. 7 minutos. Este recorrido de prueba de Monforte a Bóveda por el corredor empieza en la rotonda de la carretera de Chantada, el kilómetro cero de este nuevo vial. Sin caravanas, camiones, ni turismos que circulen muy por debajo del límite de cien vigente en todo el recorrido, es posible circular prácticamente todo el tiempo cerca de la velocidad máxima y llegar a la rotonda de acceso a Bóveda en siete minutos.

Una vez fuera de la vía de alta capacidad, dos rotondas seguidas enlazan con la LU-653, el vial que permite ir de Bóveda a la N-120 por A Pobra. Hay que hacer algo menos de un kilómetro por un tramo recto de esta carretera para llegar al cruce de Bóveda. Han pasado nueve minutos desde el kilómetro cero del corredor. Unos cientos de metros más a un máximo de cincuenta kilómetros por hora por la larga travesía que cruza Bóveda y el viaje termina frente al edificio del Ayuntamiento, nueve minutos y medio después de haber empezado.

Pero es imposible hacer el mismo recorrido de vuelta íntegramente por el trazado antiguo, porque la vieja LU-546 termina en Monforte en la travesía de O Morín, y no en el punto de partida del corredor. Así que para comparar correctamente es preciso restarle a estos nueve minutos y medio los dos y medio que cuesta completar el tramo de la vía de alta capacidad que circunvala Monforte por el norte, entre la rotonda de la calle Chantada y la salida hacia Ribas Altas y O Morín. Sin ese tramo inicial, ir de Monforte a Bóveda por la carretera nueva lleva siete minutos, al menos con el poco tráfico del día de la prueba.

por la carretera lu-546

Travesía de Bóveda-Monforte (acceso norte). 6 minutos y medio. Uno podría pensar que la vuelta por la carretera antigua va a ser más solitaria, pero no es así. Hay poco tráfico, sí, pero tampoco en el trazado nuevo había mucho. Igual que en la ida, no hay que circular en caravana y tampoco es preciso ir detrás de ningún camión. El recorrido empieza lento porque hay que respetar el límite de cincuenta en las travesías de Bóveda y Ver, pero seis minutos y medio después de arrancar frente al edificio del Ayuntamiento de Bóveda, el coche llega a la rotonda de Ribas Altas, en la entrada de Monforte.

La mejor opción para quienes tienen que ir al hospital

Cuando el corredor Monforte-Lugo esté completamente terminado, los conductores que lo completen se ahorrarán nada menos que dieciséis kilómetros de travesías, los que había que superar al hacer el mismo viaje por la LU-546. En un tramo tan corto como el inaugurado la semana pasada entre Monforte y Bóveda, quien quiera quitarle minutos a su viaje tiene que pensar muy bien a dónde quiere llegar exactamente. El taxista Carlos Lamus opta por la carretera nueva si está en Rubián. Se ahorra así los cerca de dos kilómetros de la travesía que atraviesa Bóveda y Ver. La vía de alta capacidad es mejor opción para quienes quieran evitar la travesía monfortina de O Morín -dos kilómetros y medio a cincuenta por hora-, Y probablemente también para quienes vayan a Monforte al médico. Para llegar al hospital, la mejor opción es el acceso centro a Monforte, que entra directamente a la ronda urbana por la carretera de Currelos.