Un recorrido por el museo etnográfico y arqueológico de O Saviñao
13 sep 2015 . Actualizado a las 05:00 h.En fechas recientes concluyó la tercera campaña de excavaciones arqueológicas en el castro de Arxeriz, situado en los terrenos del museo del mismo nombre, en el municipio de O Saviñao. Los restos de antiguas construcciones puestos a la luz en esta y en las anteriores campañas están abiertos a las visitas turísticas. Pero el museo, gestionado por la Fundación Xosé Soto de Fión, contiene muchos más elementos de interés y representa un valioso archivo de la cultura tradicional de la Ribeira Sacra.
El recorrido por el museo -situado a cuatro kilómetros de Escairón, la capital del municipio- empieza en una sala dedicada a la cultura fluvial. En esta sección se exhiben varias embarcaciones tradicionales de distintas zonas del Miño. Una de ellas es el batuxo, propio del curso alto. La barca típica del tramo medio es un batuxo con más cuerpo y provisto de un pouso, una plataforma para el transporte de cestas de uvas y mercancías. El curso ourensano está representado por la batela y su variante la bateliña, muy usada antaño por los contrabandistas. En la sala también se muestra una barca de estuario -típica de la desembocadura- y dos réplicas de la antigua barca de dornas, hecha de dos troncos huecos de castaño unidos por una plataforma. Puede verse además un ejemplar original de barca de paso que prestó servicio hasta las primeras décadas del siglo XX.
Artes de pesca
La siguiente sala también está dedicada a la cultura fluvial, pero se centra en las artes de pesca. Una serie de paneles explican el uso de los construcciones llamadas caneiros y pesqueiras. Los visitantes pueden ver también diferentes artefactos empleados para la captura de anguilas y salmones.
La visita continúa en el edificio principal del pazo que alberga el museo -la Casa dos Escudos-, donde está recreada una cocina tradicional provista de la típica lareira. Al lado hay una gran sala dedicada a la cultura castreña -por ahora solo contiene algunas piezas-, en la que se expondrán los materiales hallados en las excavaciones. La siguiente sección es la sala del patrimonio, donde se muestran los trajes usados en el entroido ribeirao de Chantada. En esta parte está previsto exponer además muestras de alfarería de Gundivós y Niñodaguia junto con paneles informativos sobre el patrimonio románico de la zona y reproducciones de varios elementos arquitectónicos.
A continuación se halla una sala dedicada a la viticultura tradicional que encierra una importante colección de aperos y artefactos utilizados en diversas labores, desde la preparación de los bancales vitícolas hasta la vendimia y la elaboración y el almacenamiento del vino en las bodegas. Entre ellos hay un llamativo conjunto de caracochas -barricas hechas de troncos de castaño ahuecados- y pipas carrales, adaptadas a la cheda o plataforma de los carros de bueyes.
Después de esta sala, los visitantes salen al exterior y pasan por una finca en la que están plantadas todas las variedades de vid que se cultivan en la Ribeira Sacra. Esta parte del recorrido comprende además el llamado Forno da Casa -una construcción rústica formada por un horno de cantería y otro de teja de barro-, un hórreo y un gallinero en el que se crían ejemplares de la variedad autóctona llamada pita de Mós. Finalmente, el itinerario museístico finaliza en el castro, donde destacan los vestigios de tres construcciones que según todos los indicios eran silos de cereal y que forman un conjunto de arquitectura agrícola antigua único en Galicia.
Horarios y precios
El museo abre de 11 a 14 y de 17 a 20 horas de miércoles a domingo, ambos inclusive
La visita cuesta dos euros por persona y es gratuita para los menores de edad