Condenados a entenderse durante cuatro años

LEMOS

18 may 2015 . Actualizado a las 22:51 h.

Todo parece indicar que PSOE y BNG van a tener que entenderse en los próximos cuatro años. A medida que pasa el tiempo y se repiten las encuestas, los números van entrando en sus casillas y encajando. Si en la encuesta anterior le salían siete concejales al PP pesar de que perdía votos con respecto a sus últimos resultados, ahora se ve que no consigue más de seis, y los datos encajan más con la valoración de la candidata y con el número de personas que dicen conocerla.

Con este resultado de la encuesta, la nueva corporación ya empieza a dibujarse sobre el papel. Visto que Esperta Monforte! sigue sin obtener concejal, y que el PP está muy lejos de la mayoría, todo apunta a que el próximo gobierno municipal estará formado por el BNG y el PSOE. Lo que falta es saber quién será el que obtenga más votos y por tanto cuál de los dos candidatos va a ser el alcalde. Pero lo que ya se sabe es que las concejalías probablemente estarán repartidas entre socialistas y nacionalistas en un gobierno de coalición.

Tendría que ocurrir una especie de milagro en la semana que resta para que las cosas cambiaran. Por ejemplo, tendrían que empezar a apoyar a la candidata del Bloque sus votantes igual que hicieron con Severino Rodríguez cuando le dieron la mayoría absoluta; pero la mitad de los encuestados dicen no conocer a Pilar López. Y eso es un problema grave en unas elecciones municipales en las que se vota al candidato más que a las siglas, por mucho que Severino Rodríguez intente apadrinarla.

Otro posible milagro sería que los electores creyesen que se van a montar dos grandes empresas anunciadas por el PP en plena campaña electoral; y que además considerasen que ese sería un logro únicamente factible si gobierna el PP en Monforte.

Como lo más probable, sin embargo, es que no se produzcan estas rarezas estadísticas, todo apunta a que se reeditará un gobierno bipartito muy equilibrado entre BNG y PSOE, en donde lo único que falta por ver es quién es el más votado para ostentar la alcaldía.

Hay un porcentaje muy elevado de votantes que aún se lo están pensado; y que no tienen claro aún a quien van a votar. Serán ellos los que pongan al alcalde, dado el nivel de empate técnico entre socialistas y nacionalistas y que el PP no tiene un posible socio en quien apoyarse.

Las encuestas vienen a demostrar, por otra parte, lo inútiles que resultan las campañas electorales, porque mientras se suceden los actos políticos y las promesas desde todos los partidos, los ciudadanos siguen indecisos. Les da igual desde qué púlpito se predica, quizá porque a estas alturas ya perdieron la fe en los predicadores.