Osos contemporáneos y prehistóricos

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Captura del vídeo grabado en Seceda con un oso atacando una colmena
Captura del vídeo grabado en Seceda con un oso atacando una colmena

02 ene 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

A principios de agosto se grabaron en el pueblo de Seceda las primeras imágenes de vídeo de un oso pardo tomadas en la sierra de O Courel, que confirman de manera indudable la presencia esporádica de esta especie en la zona. La grabación se realizó en plena noche con la técnica de fototrampeo en un colmenar que había sufrido diversos destrozos en las semanas precedentes. Las imágenes muestran cómo un ejemplar juvenil de 1,20 metros de altura y entre sesenta y setenta kilos de peso se acerca a una colmena, se pone en pie y la derriba con las patas delanteras.

La filmación fue realizada gracias a la colaboración entre el biólogo Pedro Alonso y un grupo de apicultores de Seceda y apenas tiene precedentes en Galicia. Con anterioridad solo se había podido grabar un vídeo de muy corta duración en el que se ve cómo un oso se intenta acercar a un colmenar de O Robledo da Lastra -en el municipio de Rubiá. en Ourense- y es repelido por un pastor eléctrico. Esta grabación fue efectuada en la primavera del 2006 por técnicos de la Fundación Oso Pardo.

Parentesco fósil

Por otro lado, los científicos del Instituto Universitario de Xeoloxía de A Coruña siguieron desarrollando durante el 2014 una investigación con fósiles del extinto oso cavernario (Ursus spelaeus) descubiertos en el yacimiento de Cova Eirós que sugiere la existencia de un vínculo genético entre estos ejemplares y otros que se localizaron en la célebre cueva de Chauvet -en Francia-, donde se conserva también uno de los conjuntos de arte rupestre más antiguos del mundo. Los plantígrados de Cova Eirós tienen una antigüedad de entre 28.000 y 31.000 años y presentan una mayor proximidad genética con los que vivieron en esa misma época en la caverna francesa que con otros de períodos anteriores que fueron encontrados en diversas cuevas de O Cebreiro y O Courel.

La investigación sigue en curso y se espera que puedan proporcionar nuevos datos acerca de las movimientos migratorios de las poblaciones de osos prehistóricos entre el norte de la Península Ibérica y otras zonas de Europa. Los investigadores de este instituto, asimismo, continúan trabajando en un proyecto que tiene por objetivo obtener secuenciaciones genéticas de los restos humanos más antiguos conocidos hasta ahora en Galicia, localizados en la gruta de Valdavara -en Becerreá- y en la Cova do Uro, en la sierra de O Courel. Los resultados podrían darse a conocer en los próximos meses.