Los trabajadores intentarán que les pague el Fogasa, en vista de que la empresa no lo hará

La Voz

LEMOS

16 oct 2014 . Actualizado a las 05:05 h.

Cientos de personas utilizan con más o menos frecuencia las instalaciones de la piscina municipal de A Pinguela. Su continuidad en peligro es por tanto un problema social, pero para los trabajadores que atienden las instalaciones es algo más. Siguen acudiendo a sus puestos a diario, pero la última nómina que cobraron es la de junio. De las tres siguientes no han visto ni un euro.

UGT, el sindicato que los representa, tiene intención de reclamar directamente al Fogasa esos tres mensualidades -y también el de octubre cuando termine el mes-. Mario Docasar quería entrevistarse con el administrador designado por el juzgado de Ourense que dirige el concurso de acreedores con la intención de conocer la situación general de la empresa, pero sobre todo para pedir el pago de las nóminas atrasadas. Según su versión, el administrador le dejó claro que con el volumen de deuda que arrastra la empresa los trabajadores ya pueden olvidarse de sacar ni un euro del proceso concursal.

El administrador concursal tiene hasta el 30 de noviembre para acordar un plan de pago a los acreedores, empezando por los preferentes, que son Hacienda y la Seguridad Social. Para entonces se sabrá probablemente si el proceso de concurso termina con el cierre de la empresa. El Grupo Pazos tiene todos sus bienes hipotecados y sus cuentas intervenidas por Hacienda, según aseguran en UGT.