La Feira do Viño de Amandi celebra a lo grande sus 33 años

Francisco Albo
francisco albo MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

ROI FERNANDEZ

Sober acoge hoy la jornada principal del popular certamen vinícola

24 mar 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

La feria vinícola más antigua de la Ribeira Sacra celebra este fin de semana su 33 cumpleaños y lo festeja a lo grande. La carpa que alberga la Feira do Viño de Amandi es la de mayor tamaño de las que se instalaron hasta ahora en la plaza del Concello de Sober y pudo armarse gracias a que -atendiendo a la petición del gobierno municipal-, la empresa Gas Local Unión Fenosa retiró recientemente unos cables que cruzaban este espacio público. Bajo la espectacular estructura de cuarenta por cuarenta metros, al abrigo de chubascos inoportunos, están instalados los puestos de las veintidós bodegas que participan en la feria y otros en los que se exponen diversos productos típicos de la zona.

El festejo fue inagurado al mediodía por familiares de Pedro Pérez Fernández, un bodeguero recientemente fallecido que fue de los que estuvieron presentes en la feria desde el comienzo y no dudaron en iniciar los pasos para conseguir la denominación de origen Ribeira Sacra, que en aquel ya lejano Domingo de Ramos de 1981, cuando echó a andar el certamen, todavía parecía un proyecto utópico.

Acompañados por la tradicional animación musical de charangas y pasacalles, numerosos vecinos de Sober y visitantes de toda la comarca y de más lejos desfilaron a lo largo del día bajo la carpa, con más intensidad por la tarde que por la mañana.

Generación de 1981

La organización decidió por otra parte conmemorar la mística cifra de los 33 años con un acto de homenaje que se ofrecerá hoy a los vecinos del municipio que nacieron el mismo año que la feria. El alcalde, Luis Fernández Guitián, señala que en 1981 nacieron en Sober 21 niños y niñas, de los que solo doce siguen empadronados hoy en la zona. «Pero curiosamente hoxe temos censados máis veciños nados nese ano que os que naceron aquí daquela, porque algúns foron vivir noutras localidades, pero a cambio viñeron outros», puntualiza. Así que a pesar del fuerte bajón demográfico sufrido en estas tres décadas, ahora son 26 los habitantes de Sober que tienen esa edad.