El principal «valedor» del dueño de los prostíbulos era un guardia

José Fernández LUGO / LA VOZ

LEMOS

Armando Lorenzo, acusado de realizar numerosos favores al proxeneta

02 abr 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

El presunto proxeneta y supuesto cabecilla de la trama de los burdeles, José Manuel García Adán, tendría como principal valedor al cabo Armando Lorenzo, según la documentación manejada por el juzgado instructor de la Operación Carioca. En las investigaciones aparecen numerosas referencias de como el agente efectuó numerosos favores al dueño de los clubes. Incluso medió ante la Inspección de Trabajo para que no le impusiesen una sanción de 15.000 euros.

Todo apunta a que la supuesta ayuda prestada por el cabo al supuesto proxeneta fue valiosísima a lo largo de los años que mantuvieron relación. En los primeros días de febrero de 2009, por ejemplo, el agente supuestamente hizo gestiones para que Adán se librase del pago de una multa de 15.000 euros impuesta por la inspección de trabajo como consecuencia de la denuncia presentada por una cocinera suya.

Connivencias

El guardia habló con una inspectora de trabajo y con el marido que, presuntamente se encargaría de hacer el recurso contra la denuncia. Finalmente no se sabe si surtieron efecto las gestiones realizadas por el agente.

El guardia supuestamente asesoró al jefe de la trama en marzo de 2009 cuando le precintaron las máquinas de tabaco en sus clubes. Durante cuatro días tuvo que cerrar los establecimientos. El primero en llamar al empresario, al tener constancia de la sanción, fue el funcionario de la benemérita. Posteriormente le orientó en lo que tenía que hacer para que los establecimientos pudieran seguir funcionando con normalidad. En este tramite supuestamente también intervendría orto guardia civil implicado, el subteniente Julio Baquero, que era el jefe del cabo.

Baquero, detenido en su momento e imputado, aparece relacionado en numerosos documentos. Supuestamente ayudó y facilitó información a los proxenetas en vez de actuar contra ellos, como supuestamente lo reflejarían las numerosas comunicaciones telefónicas captadas en su momento por los investigadores. Especialmente llamativa fue la actuación del jefe y el subordinado en una actuación llevada a cabo por ambos cuando detuvieron a responsables de los clubes Queens y Colina.

Las investigaciones revelan que tanto Armando como Baquero prestaron una especial ayuda a José Manuel García Adán con motivo de una actuación llevada a cabo en El Colina de Robra. La actuación de ambos, supuestamente, parecía destinada más a proteger al dueño que a una trabajadora que, al parecer, había tenido un problema consistente en una presunta agresión efectuada por parte del encargado del establecimiento. La mujer contó que estaba secuestrada y que la obligaban a prostituirse, pero parece que no hubo actuación alguna.