12 nov 2009 . Actualizado a las 02:00 h.
La catástrofe del Prestige dejó en Galicia muchas promesas. Algunas, despacio, se van cumpliendo (AVE, puerto exterior, autovías); otras eran desde el principio un brindis al sol (construcción de buques civiles en Fene); por último está la marcha atrás en algunas que ya habían arrancado. Es el caso del panel de expertos con que contaba Galicia. Algunos de los técnicos se han ido a Madrid, pero lo peor es que otros se dedican a otras tareas. Galicia no se puede permitir perder el aprendizaje que este grupo de expertos había acumulado durante la catástrofe y en los años posteriores. Porque el Prestige no fue el primer barco con problemas frente a las costas gallegas y, por desgracia, probablemente no sea el último.