Los asistentes a la junta de gobierno de esta tarde serán informados de la crítica situación económica El único patrimonio de la institución son los locales de su actual sede
22 oct 2002 . Actualizado a las 07:00 h.La Confederación de Empresarios de Lugo acumuló pérdidas que superan ampliamente los cien millones de pesetas (600.012 euros) durante los últimos años. Esta situación será comunicada a la junta de gobierno que se reúne hoy para analizar la crisis abierta a raíz de la renuncia irrevocable de ocho de los trece miembros de la junta de gobierno. Un informe de auditoría del año 1996, cuando el anterior presidente Guillermo Sánchez Vilariño llevaba en el puesto seis años, recomendaba tomar ese ejercicio como año cero a efectos contables para darle un nuevo giro a las cuentas. Sánchez Vilariño heredó de su antecesor en el cargo, Luis Abelleira Mayor, una confederación saneada, con el crédito hipotecario sobre el edificio de Santo Domingo, el buque insignia de la patronal lucense, ya cancelado; con unos ingresos de 20 millones de pesetas en cuotas y con una plantilla de ocho personas. Once años después de este relevo la CEL cuenta con una plantilla de 28 personas y con un déficit económico de más de cien millones de pesetas. El actual presidente de la CEL, que anunció días pasados su intención de no dimitir y continuar en el cargo para llevar a cabo la labor que le fue encomendada, propondrá hoy a los asistentes a la junta de gobierno una serie de medidas para intentar salir de la crítica situación en la que está sumida. Entre las posibilidades existentes figura la de aportaciones por parte de los socios, una solución casi nunca bien aceptada por aquéllos que tienen que asumirla, o un plan de austeridad y de reducción de gastos. El primer paso podría estar dado y consistiría en la rescisión del millonario contrato de alquiler de las instalaciones del centro de formación de la calle Montero Ríos y que suponía un desembolso anual de 21,6 millones de pesetas, una de las herencias del anterior equipo de la patronal lucense con las que se encontró el actual titular. El único patrimonio con el que cuenta la Confederación de Empresarios de Lugo para afrontar la situación crítica en la que está sumida es, en estos momentos, la planta de 450 metros cuadrados, libres de hipotecas, de la plaza de Santo Domingo, que constituyen su sede. Tipo de contabilidad Una de los principales roces entre el actual presidente y su antecesor en el cargo se centró en el tipo de contabilidad. Pese a que Martínez Dapena apuntó en varias ocasiones que el tipo que se estaba siguiendo era correcto, puntualizó que echaba de menos una contabilidad analítica, que permitiera conocer exactamente el funcionamiento por departamentos, una práctica que es común en las empresas y que permite seguimientos pormenorizados. Aunque no puntualizó a que se refería con esta cuestión en concreto, parece ser que aludía directamente a que la contabilidad del CISE y de la CEL no estaban separadas. Numerosas personas, sobre todo relacionadas con los cursos de formación y su entramado, mostraron su sorpresa por el hecho de que una organización como la patronal lucense registrara déficit en los últimos años, cuando los cursos de formación, a través del 10% de gastos de difícil justificación, figura que está contemplada legalmente y manida a raíz del fraude detectado en el Forcem, suelen constituir una importante fuente de financiación para quienes los imparten.